
Marta Galauret, catedrática de la Universidad de Murcia. hy21
Marta Garaulet, experta en crononutrición, avisa a España: "La mejor hora para tomar un dulce son las 12 del mediodía" 3sk41
La doctora de la Universidad de Murcia se muestra contundente con respecto a la importancia de los horarios en los que hacemos las principales comidas del día. r263n
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Resistirse a una onza de chocolate después de comer o un pastelito que tenías guardado en la nevera a media tarde es, casi siempre, misión imposible para un altísimo porcentaje de la población. La tentación es difícil de combatir, especialmente en determinados días en los que cualquier factor puede alterar las ganas de ello.
El momento del día en el que tomas un dulce puede marcar la diferencia entre que tu cuerpo lo procese bien o que termine almacenándolo como grasa. Así lo confirma Marta Garaulet, una de las mayores expertas en crononutrición y profesora en la Universidad de Murcia, además de profesora visitante de la Universidad de Harvard.
La reputada doctora se muestra contundente: la mejor hora para tomar un dulce es a las 12 del mediodía. Según Garaulet, esta es la franja horaria en la que nuestro cuerpo está más preparado para gestionar los hidratos de carbono gracias a cómo funciona nuestro "reloj interno". Pero ¿por qué sucede esto? ¿Qué consecuencias tiene comer dulces en otros momentos del día?
Qué es la crononutrición 494h
Marta Garaulet lleva décadas investigando cómo afecta la hora a la que comemos en nuestro metabolismo. Su especialidad, la crononutrición, analiza cómo el momento de la ingesta influye en la forma en que el cuerpo asimila los alimentos. Su descubrimiento revela que no solo importa qué comemos, ni cuánto, sino también cuándo.
Nuestro organismo funciona con ritmos biológicos, los famosos ritmos circadianos, que determinan cómo trabajan órganos como el hígado, el páncreas o el tejido adiposo (la grasa corporal) a lo largo del día. "A nuestro cuerpo le gusta anticiparse. Si sabe que vamos a comer a una hora concreta, se prepara para ello: activa hormonas, pone en marcha la digestión y regula la insulina", explica Garaulet.
Pero, ¿por qué las 12 del mediodía es la hora ideal para comer dulces? A esa hora, el cuerpo tiene la mejor capacidad para manejar los carbohidratos, especialmente los de absorción rápida, como los que contienen los dulces. En otras palabras, es el momento del día en el que la insulina, la hormona que regula el azúcar en sangre, actúa con más eficacia.
Esto significa que si tomas una porción de tarta a mediodía, tu organismo será capaz de procesarlo mejor, evitando picos de azúcar y reduciendo la posibilidad de que se almacene como grasa. En cambio, si lo haces por la tarde o, peor aún, por la noche, la capacidad del cuerpo para lidiar con ese "subidón de glucosa" disminuye, lo que puede favorecer el sobrepeso, la resistencia a la insulina y otros problemas metabólicos.
Comer tarde engorda más l3068
Una de las afirmaciones más sorprendentes de la doctora Garaulet es que cenar tarde no solo altera el sueño, sino que puede hacernos engordar más, incluso si no comemos más cantidad. Por la noche, los niveles de melatonina aumentan y el páncreas reduce su capacidad de producir insulina, lo que hace que los niveles de azúcar en sangre se mantengan altos por más tiempo.
Además, durante la noche el cuerpo no está preparado para recibir grandes cantidades de energía. Está en "modo descanso", no en "modo digestión". Por eso, tomar dulces (o cualquier comida copiosa) a última hora del día provoca una peor metabolización y un mayor riesgo de almacenar esa energía extra en forma de grasa.
Garaulet también menciona que el desayuno debe ser energético, pero equilibrado, sobre todo si eres de cronotipo "alondra" (personas más activas por la mañana). Sin embargo, advierte que no conviene concentrar toda la energía en una sola comida, y valora positivamente la distribución habitual en España, donde el almuerzo es la comida principal del día.
Eso sí, si vas a darte un capricho, no lo hagas a primera hora ni a última. Guárdalo para el mediodía, cuando tu cuerpo lo va a manejar mucho mejor.
El dulce, mejor con proteínas, grasas y fibra j5o3g
Otro punto clave que destaca la experta es que no solo importa la hora, sino cómo combinamos los alimentos. Por ejemplo, la dieta mediterránea, rica en hidratos de carbono, no ha sido tradicionalmente diabetogénica (es decir, no ha generado muchas diabetes) porque los platos incluyen mezclas inteligentes: arroz con verduras y carne, tortilla de patata con huevo y aceite de oliva, guisos con legumbres y verduras…
Estas combinaciones hacen que la absorción de glucosa sea más lenta y equilibrada, evitando los picos bruscos de azúcar en sangre. Así que si vas a tomar un dulce a mediodía, mejor que vaya acompañado de una comida que incluya proteínas, grasas saludables y fibra.
Por tanto, si te gusta darte un capricho dulce de vez en cuando, no tienes que eliminarlo de tu dieta, pero sí puedes ajustarlo al mejor momento del día para que no afecte a tu salud ni a tu peso: las 12 del mediodía es la hora ideal, según la ciencia.
Y como dice la propia Garaulet, no se trata de vivir obsesionado con las calorías o prohibiciones, sino de entender cómo funciona nuestro cuerpo y actuar en consecuencia. La crononutrición no es una moda, es una herramienta para vivir mejor, comer de forma más inteligente y cuidar tu salud sin renunciar al placer.