Iván se despide de una cervecería familiar con 50 años de historia en Zaragoza: "Somos de la vieja escuela" 3e5e5z

Uno de los bares más míticos de Zaragoza se prepara para una nueva etapa. Se trata de la cervecería Tramsburgo, un lugar clásico, de los de toda la vida, ubicado en la calle Asín y Palacio, 11, junto al estadio de La Romareda. Tras medio siglo, Iván González y su familia esperan ahora para poder traspasarlo.

La historia de esta cervecería comenzó hace 50 años con generaciones anteriores. “Mi abuelo fue el que empezó, estuvo unos cinco años, luego lo cogió ya mi padre, desde muy joven, con un socio”, relata Iván González, el actual responsable del negocio en manos de sus padres. “Llevamos aquí toda la vida”, ratificaba el joven.

Iván explica que trabaja junto a su padre en el bar, pero para este ha llegado la hora de la jubilación y él no quiere continuar. Así pues, la familia busca un relevo para este establecimiento tan consolidado en la zona y en la ciudad.

Gabi Leonardi, el chef que reabre su restaurante en el centro de Zaragoza: "Queremos ser un referente gastro"

Ya han anunciado su adiós y detalla que agosto es la fecha límite para “colgar las botas", aunque no haya interesados para entonces.

“Este trabajo es una mina”, confesaba el dueño. “Es una gran zona y cuando hagan el nuevo campo va a ser increíble. Los nuevos que vengan en unos cinco años pueden ganar bastante”, confirmaba Iván animando a otros emprendedores.

"El Real Zaragoza juega dos partidos al mes, es un gran impulso, muy importante, pero no te da la vida. Lo bueno de esta plaza es que tenemos una gran terraza que se llena fácilmente, y si sacas el trabajo, vendes mucho", sumaba.

Aiwa se despide de su bar tras casi 15 años en Zaragoza: "No voy a dejar de venir ni de hablar con los amigos de aquí"

Por otro lado, aunque en su caso haya decidido no continuar con la cervecería, cuenta que tienen unos clientes “maravillosos”, quienes lamentarán la noticia.

Sin duda, si por algo puede destacar la cervecería Tramsburgo es por sus patatas bravas, las mejores de Zaragoza para muchos. De hecho, Iván concreta que venden “unas 10 toneladas al año”, una barbaridad.

Más allá de estas, en su carta también se pueden elegir hamburguesas, bocadillos, perritos, raciones o las tapas de la barra. Todas ellas deliciosas y elaboradas con mucha dedicación, “muy de la vieja escuela”.