
Melody cantando 'Esa Diva' en la primera semifinal del Festival de la Canción de Eurovisión 2025. Agencias. 634s9
'Zorra’ le pasa el testigo a 'Diva’: los diez alegatos feministas que han hecho historia en Eurovisión 2j6559
El festival, que en 2024 fue seguido por 163 millones de personas y en 156 países, es un 'gran altavoz' para que las canciones hablen sobre las mujeres. 3o5864
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Gracias a Melody, la representante de España en el Festival de la Canción de este año, ha quedado claro que "una diva es valiente, poderosa, su vida es un jardín lleno de espinas y rosas (...), es la madre que madruga, es la artista sin cartel, con dinero o sin fortuna, ellas son divas también".
Con esta oda a las artistas y a las mujeres en general, a través del relato autobiográfico, la joven sevillana ha pasado de cantar "El baile del gorila" con apenas nueve años a protagonizar, con 34, toda una performance eurovisiva con un mensaje de empoderamiento femenino.
Es importante dar voz a las historias de las mujeres y más en espacios tan multitudinarios y con tanta repercusión mediática como Eurovisión. En 2024, el festival fue emitido en las televisiones de 156 países de todo el mundo y seguido por 163 millones de personas. De esa cifra, casi cinco millones fueron españoles sintonizando La 1 para ver el certamen.
Fue justo el año pasado cuando Nebulossa, el dúo alicantino formado por María Bas y Mark Dasousa, interpretaron Zorra en el concurso y consiguieron cambiar la connotación negativa de la palabra. La canción se convirtió en todo un himno que muestra la crítica a la que con frecuencia se enfrentan las mujeres por el mero hecho de ser libres y de hacer lo que quieren.
"Si salgo sola, soy la zorra, si me divierto, la más zorra, si alargo y se me hace de día soy más zorra todavía. Cuando consigo lo que quiero, jamás es porque lo merezco (...)".

El grupo "Nebulossa" formado por la pareja María Bas y Mark Dasousa.
Con este tema se pretendía enseñar la realidad, pero no causar pena. En todo caso, la canción lanzaba un mensaje esperanzador: "Estoy en un buen momento (zorra, zorra, zorra), reconstruida por dentro (zorra, zorra, zorra) y esa zorra que tanto temías se fue empoderando y ahora es una zorra de postal".
Manifiestos internacionales 1z4q1e
Pero no solo España ha tenido odas feministas en sus representaciones eurovisivas, hace tan solo tres años, en 2021, tanto Rusia como Letonia subieron al escenario con un mensaje cantado por y para las mujeres.
Manizha Dalérovna Sanguín, conocida artísticamente como Manizha, sabe lo que es el sufrimiento 'en sus propias carnes' ya que con apenas tres años tuvo que huir junto a su familia de su ciudad natal, Tayikistán, debido a la guerra civil tayika. El destino fue Moscú, donde empezó a recibir clases de canto.
La canción que la acompañó al festival se llama Russian Woman, honrando a la ciudad que la acogió y de la que se siente parte. En ella, comenzó haciendo una llamada femenina: “Cada mujer rusa necesita saber, eres lo suficientemente fuerte, vas a romper el muro" y terminó retratando los eternos cuestionamientos a los que se someten las mujeres a lo largo de sus vidas.
"Ya tienes más de treinta, ¿dónde están los niños? Eres en general hermosa, pero deberías adelgazar, ponte algo más largo, ponte algo más corto".

Manizha, la última representante de Rusia en Eurovisión hasta la fecha.
La letona Samanta Tina interpretó un ‘invite’ a las mujeres. Con su tema The Moon Is Rising intenta ser guía y ayuda en el camino de todas ellas, recordándoles que "están en el lugar correcto" y apelando a que son "gobernantes" que tienen "sus propias reglas".
Su propósito no se quedó en la letra de la canción, ya que, fuera de los escenarios, también ofreció declaraciones como: "Invito a las mujeres a no tener miedo de ser ellas mismas, ni de ser diferente, que se pongan la corona para liderar sus vidas".
En el 2019, Macedonia llevó a Eurovisión un tema con un título revelador: Proud. A lo largo de sus tres minutos y medio, Tamara Todevska quiso empoderar a todas las chicas del mundo a las que les han dicho alguna vez "cómo lucir, sonreír, actuar y moverse".
"Aférrate a mí, siempre estoy de tu lado. No tengas miedo de desplegar tus alas y volar. Diles, levanta tu voz y dilo en voz alta. Muéstrales lo que significa levantarse con orgullo".
Justo un año antes, la cantante y DJ israelita Netta Barzilai, autoapodada en la canción como 'Barbie', se proclamó ganadora del certamen con Toy. En ella, precisamente 'reabre el baúl de los recuerdos' con alusiones al "osito de peluche", a "Pikachu" o al mítico juego de "Simón dice" para reivindicar que las mujeres "no son juguetes" de nadie.

Netta Barzilai, ganadora de Eurovisión 2018.
Una de las actuaciones más desgarradoras ocurrió en 2016, cuando Serbia llevó una propuesta sobre la violencia machista. El tema, interpretado por Sanja Vučić y titulado Goodbye, narra en primera persona la historia de malos tratos de una mujer que "desearía haber podido pararlo", pero que "se ha lamido sus heridas y puede seguir luchando".
El siglo pasado 1w3s27
Si se echa la vista más atrás, cambiando incluso de siglo, también se pueden encontrar mensajes inspiradores para las mujeres e incluso encontrar a otra "diva" como Melody. Con una canción así titulada, en el año 1998, la israelita Dana International, hizo historia al ser la primera persona transexual en ganar Eurovisión.
Subida al escenario cantaba sobre las vidas de aquellas mujeres que han tenido nombre en la historia y la mitología, como la Virgen María, Afrodita, Victoria o Cleopatra, a las que ella consideraba “divas”.

La cantante Dana International, en el 1998, durante su actuación en Eurovisión.
Fue en 1969 cuando el país vecino llevó Desfolhada Portuguesa de Simone de Oliveira al concurso. Aunque en esencia trata sobre la tradición agrícola que consiste en retirar la espiga del grano, cuenta con un verso muy polémico por la situación del país en aquel año.
Las mentalidades más conservadoras de Portugal mostraron rechazo a la estrofa: "Quien tiene un hijo, lo hace por gusto", una expresión portuguesa que alienta a que el tener hijos sea algo voluntario y no una obligación.
Unos años antes, en 1965, la cantante y actriz danesa Birgit Brüel interpretó For Din Skyld, tema con el que "echa la culpa" de la sumisión femenina a la opresión machista. Se revela con frases como: "Por tu culpa soy femenina, delicada y coqueta (...) porque tu sueño es domarme, débil y tímida, mientras valientemente me resisto".