Sergio Peris-Mencheta junto a su libro, en un montaje de EL ESPAÑOL.

Sergio Peris-Mencheta junto a su libro, en un montaje de EL ESPAÑOL. Gtres

Famosos '730 DÍAS'

Sergio Peris-Mencheta revela el "maltrato" que sufrió de su padre: "Las hostias que me dio son parte de mi enfermedad"

El actor ha publicado este miércoles, 28 de mayo, '730 días: la enfermedad como espejo del tiempo'. EL ESPAÑOL ha tenido al tomo. 

Más información: Sergio Peris-Mencheta, tras recibir el trasplante de su hermano: "Sus células no reconocen la casa donde están"

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28 de mayo de 2024. Los Ángeles. La vida de Sergio Peris-Mencheta (50 años) está a punto de cambiar. Aquel día, el actor de Snowfall se sometió a un trasplante de médula gracias a su hermano, Juan. Una oportunidad que él mismo catalogó en su Instagram como un "renacimiento". Unas células que, tal y como señaló, "no reconocen la casa en la que están".

Un año. 365 días después, Peris-Mencheta encara la vida de otra forma. El pasado mes de abril cumplió 50 años y ahora acaba de sacar a la luz 730 días: la enfermedad como espejo del tiempo, su primer libro, en el que detalla sin tapujos su ardua batalla contra el cáncer y al que EL ESPAÑOL ha podido tener . No es asunto baladí el título del tomo, pues representa el tiempo que ha abarcado la escritura del libro y, a la vez, un periodo de transformación profunda.

Las casi 300 páginas que componen el primer libro de Sergio Peris-Mencheta ponen los pelos como escarpias a cualquiera que tenga la oportunidad de sumergirse en ellas. Un relato realista a la par que duro y conmovedor, en el que relata algunas de sus vivencias más íntimas y que, hasta el momento, no habían sido contadas.

Dicen que los agradecimientos que se incluyen en un libro hacen referencia a todas aquellas personas que te apoyaron el proceso. Muchos escritores dedican sus páginas satinadas a sus parejas o a sus hijos. Sergio Peris-Mencheta, en su caso, hace lo propio con su padre. "A papá, inalcanzable", se lee al inicio de 730 días: la enfermedad como espejo del tiempo.

Estas tres breves -pero profundas- palabras llevan al lector a imaginarse una estupenda relación entre padre e hijo. Una simple lectura disipa en parte esta idea, pues son varias las escenas en las Sergio relata el maltrato que vivió por parte de su padre, Luis Peris-Mencheta.

"Papá gestionó la educación de mi hermano, Juan, y la mía como supo o como pudo. Nos pegaba. A mí y a él, aunque a mi madre nunca le puso una mano encima", plasma el actor en la página 74 de su biografía. Estas palabras, recogidas en el capítulo cuatro del libro, sobrecogen a cualquiera que tenga la oportunidad de leerlas. Unas declaraciones con las que el que exjugador de rugby da paso a una serie de trágicas escenas.

Sergio Peris-Mencheta.

Sergio Peris-Mencheta. Europa Press

El miércoles 28 de mayo de 2014, Sergio se despidió de su progenitor en una habitación de la Unidad de Paliativos del hospital Carlos III de Madrid. Estaba "hasta arriba" de morfina a causa de la leucemia. Tan solo dos días después, la muerte se lo llevó definitivamente. Una enfermedad que padece ahora él mismo y que vivió también su abuelo. 

El fallecimiento de Luis Peris-Mencheta hace ya más de una década marcó un punto de inflexión en la vida de Sergio. Así lo refleja él mismo en el tomo. "Con la muerte de papá se iniciaron una serie de dolencias y padecimientos que no había experimentado hasta la fecha. Me daba la sensación de que tenía la garganta cerrada y no pasaba el oxígeno suficiente", relata el productor teatral. Tiempo después, caería en la cuenta de que se trataba de un ataque de ansiedad.

Un tanto controvertida podría definirse la relación entre padre e hijo. Y es que, aunque son varios los momentos en las que el actor se deshace en elogios hacia su progenitor, no duda en contar con detalle todas las escenas en las que el maltrato opacaba cualquier otra realidad.

"Papá fue un gilipollas emocional. Pero fue el ser humano al que más he querido y querré siempre. Si repaso todos los momentos traumáticos con él, termino cayendo en la cuenta de que esas hostias y ese maltrato son parte de quien soy. Son parte de mi enfermedad, sin duda, pero también lo son de mi cura", escribe Sergio, textualmente, en la página 84 de su libro. 

Sergio Peris-Mencheta junto a su madre y su hermano, Juan.

Sergio Peris-Mencheta junto a su madre y su hermano, Juan. Instagram

Paparotti -como le apoda Sergio de forma cariñosa- cuenta incluso con varios capítulos en el libro. Uno de ellos, el sexto de los once apartados en los que se divide 730 días: la enfermedad como espejo del tiempo. Un lazo -el de padre e hijo- marcado por las idas y venidas "Quise a mi papá, y me atrevo a decir que probablemente es el ser al que más he querido, el que más me maltrató,, pero también el que más me quiso", se lee.

No era Sergio el único que vivió en sus propias carnes el maltrato por parte de su padre. También su hermano, Juan. "Hace unos años, Yonyon me contó que recordaba una noche que papá estaba bañándonos. Yo debía tener unos seis años. Me puse de pie en la bañera y le debí de salpicar, y me soltó tal hostia que me caí de bruces y perdí el conocimiento", relata el que fuera presentador del programa Traitors.

Recuerda también Peris-Mencheta la última vez que su progenitor le puso la mano encima. Fue cuando él tenía 16 años y era capitán de la selección española de rugby. "En el salón de mi casa había un espejo enorme y pude vernos forcejeando el uno frente al otro. Le metí un empujón a mi padre y lo estampé contra una puerta. Nunca más nos puso la mano encima a mi hermano ni a mí", apostilla.

Lola, su madre, era protectora. Una faceta que suplía las carencias de su padre. "Ella siempre priorizó el cuidado del hogar, aunque nunca fue una madre al uso. Tenaz, determinada, cuidadosa, pero con un halo de frialdad que contrastaba con su marido", escribe Sergio a eso de la mitad del libro.

Sergio Peris-Mencheta y Marta Solaz en una imagen compartida en redes.

Sergio Peris-Mencheta y Marta Solaz en una imagen compartida en redes. Instagram

No es la peculiar relación con su padre lo único que recoge 730 días: la enfermedad como espejo del tiempo. Sergio Peris-Mencheta abre su corazón en canal como nunca y recoge el descomunal apoyo por su mujer, Marta Solaz, y sus hijos, Río y Olmo. Aunque el exjugador de Rugby también tiene palabras de agradecimiento para Silvia Abascal (46), con quien mantuvo una sólida historia de amor hace unas décadas y en quien sigue encontrando un bastón.

Especial mención merece también la figura de Yonyón, el hermano y "salvador" de Sergio. No obstante, el célebre actor confiesa haber pasado años sin hablarse con él. "Juan y yo manteníamos una relación más de conocidos que de hermanos. Había muchas cuentas pendientes entre ambos". Ahora, aquel aciago trance forma ya parte del pasado.