Palestinos pasan junto a los escombros de casas destruidas por el Ejército israelí en Rafah.

Palestinos pasan junto a los escombros de casas destruidas por el Ejército israelí en Rafah. Reuters 4d3m6z

Oriente Próximo

Israel planea anexionarse Rafá, 'demoler' la ciudad y convertirla en un cinturón de seguridad que aísle Gaza 385f6x

De crearse esta zona de amortiguación, que ocupa el 20% de la Franja, Gaza se convertiría en un enclave dentro del territorio controlado por Tel Aviv. 442w1p

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Agencias
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Israel planea incorporar la ciudad sureña de Rafá y sus barrios aledaños, que ocupa una quinta parte del enclave palestino y donde antes de la guerra vivían más de 200.000 personas, a la llamada "zona de amortiguación" que están ensanchando a lo largo de la divisoria, reveló este jueves en exclusiva el diario israelí liberal Haaretz.

Citando, bajo anonimato, a funcionarios castrenses, este medio asegura que el Ejército israelí aún no ha decidido si toda Rafá será simplemente un área militar cerrada, fuera del alcance de los civiles, o si el Ejército va a demoler barrios enteros, mezquitas y cualquier edificio "eliminando efectivamente la ciudad de Rafá".

Tel Aviv buscaría absorber la zona entre el corredor de Filadelfia, que hace frontera con Egipto, y el recientemente creado Eje Morag, un corredor militar que atraviesa tierras agrícolas entre Rafá y Jan Yunis.

"Ampliar la zona de amortiguación hasta este punto tiene implicaciones significativas. No solo abarca una vasta área —aproximadamente 75 kilómetros cuadrados o alrededor de una quinta parte de la Franja de Gaza—, sino que su separación convertiría a Gaza en un enclave dentro del territorio controlado por Israel, aislándola de la frontera con Egipto", dice Haaretz.

Según la ONG israelí Rompiendo el Silencio, creada en 2014 por reservistas que se oponen a las políticas militares israelíes, antes de la creación del Eje Morag y del ensanche del área militar cerrada de Netzarim en el norte, que ocupa alrededor del 16 % de la Franja, ya estaba controlada por el Ejército israelí.

Eso es porque el Ejército ocupa un perímetro que varía entre 800 metros y 1,5 kilómetros de ancho y que bordea el enclave de norte a sur, el cual, según la organización, ha ampliado desde que reinició la ofensiva en Gaza el pasado 18 de marzo.

Si a esto se le suman las órdenes de evacuación forzosa emitidas por el Ejército, después de que el Gobierno de Netanyahu rompiera de forma unilateral el alto el fuego el pasado 18 de marzo, los palestinos no pueden acceder a más del 50 % del territorio de Gaza, según datos de la ONU de principios de abril.

Además a este perímetro no pueden entrar los palestinos y solo aproximarse a él puede ser motivo de abrir fuego contra ellos, denuncia Rompiendo el Silencio en un informe publicado el 7 de abril.

"El control militar es absoluto sobre la zona. La misión encomendada a los soldados en el terreno, según revelan sus testimonios, era crear una extensión vacía, sin nada, de aproximadamente un kilómetro de ancho a lo largo del lado gazatí de la valla fronteriza", dice esta ONG tras entrevistar a varios militares.

"A los palestinos se les negó por completo la entrada a la zona, prohibición que se aplicó abriendo fuego, incluyendo ametralladoras y proyectiles de tanque. De esta manera, el Ejército creó una zona de aniquilación de enormes proporciones", añade el informe.