Chiringuito El Saladero.
El pueblo marinero de Málaga que visitó la princesa Leonor: playas amplias y tradición pesquera
Tras completar su primer año en la Academia General Militar de Zaragoza, la heredera disfrutó de unos días de vacaciones en el litoral malagueño para desconectar.
Más información: Así fue la visita de la princesa Leonor a Málaga: pescado a la brasa en un chiringuito a pie de playa
La princesa Leonor de Borbón continúa su formación militar a bordo del buque escuela Juan Sebastián de Elcano. Este viaje forma parte de su preparación como futura jefa suprema de las Fuerzas Armadas españolas, y es un paso más dentro de su nueva vida pública.
El verano pasado, tras completar su primer año en la Academia General Militar de Zaragoza, la princesa disfrutó de unos días de vacaciones en el litoral malagueño para desconectar. El 22 de agosto de 2024, fue vista en el chiringuito El Saladero, situado en la misma arena de la playa del municipio de Vélez-Málaga, donde degustó algunos de los platos más representativos de la provincia.
A tan solo 40 minutos de Málaga capital, este local se envuelve en uno de los secretos mejor guardados de la Costa del Sol: la playa de Caleta de Vélez. Un enclave tranquilo, frecuentado principalmente por vecinos y turistas que huyen del bullicio de otros arenales más masificados.
800 metros de costa, pesca tradicional y sabor a espeto. Es lo que promete la playa de Caleta de Vélez. Cuenta con aproximadamente 800 metros de longitud y se encuentra junto al mayor puerto pesquero de la provincia de Málaga, lo que garantiza la frescura de los productos que se sirven a diario en sus restaurantes.
La princesa y su grupo de amigos eligieron el chiringuito El Saladero, uno de los locales más emblemáticos de la zona, fundado en 1965. Con mesas literalmente sobre la arena, el restaurante es famoso por su cocina basada en pescados a la brasa, espetos de sardinas y mariscos del día.
En pleno paseo marítimo de la Caleta de Vélez, tiene como especialidad el producto de mar. Espetos de sardinas, gambas, boquerones y atún con tomate. Estas son algunas de las especialidades de la casa. El restaurante se hizo en 2024 con el distintivo Solete Repsol.
El entorno del chiringuito combina la cercanía del mar con la atmósfera relajada de un pueblo con tradición pesquera. Su cocina sencilla pero deliciosa y el trato familiar lo han convertido en parada habitual tanto para locales como para quienes buscan descubrir la auténtica cocina del sur.
Más allá de su valor gastronómico, la playa de Caleta de Vélez ofrece un entorno privilegiado para disfrutar del mar en calma, realizar deportes acuáticos o simplemente pasear a lo largo de su paseo marítimo.
Además, es habitual ver embarcaciones de recreo fondeadas frente a la costa, así como pescadores locales faenando al amanecer. Un ambiente auténtico y pintoresco.
A escasos metros de la playa, también se puede visitar el Puerto Deportivo de Caleta de Vélez, el más importante de la Axarquía malagueña, donde se organizan actividades náuticas como paddle surf, kayak o salidas en barco.
Quienes deseen alargar la jornada pueden recorrer el cercano núcleo urbano de Torre del Mar o adentrarse en el interior para descubrir rutas rurales por pueblos blancos como Arenas, Canillas de Aceituno o el Parque Natural de las Sierras de Tejeda, Almijara y Alhama.
