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El simpático momento de Froilán en su regreso a España, escondido detrás de un parquímetro en Madrid 2e1642
El nieto de los Eméritos ha regresado a nuestro país cinco meses después de su última visita. Muy amable, ha respondido a las preguntas de la prensa. 1q3p1y
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Froilán ha vuelto a España. El hijo de la infanta Elena (61) y Jaime de Marichalar (62), afincado desde 2023 en Abu Dabi, se encuentra estos días en la capital. Como viene siendo habitual, su presencia en suelo español no ha pasado desapercibida. Una vez más, el sobrino de Felipe VI (57) se ha dejado ver en el hábitat donde se encuentra más cómodo: la noche madrileña.
En su reaparición, mientras disfrutaba de un paseo en solitario por el barrio de Chamberí, se ha mostrado muy comunicativo. Y con una de sus salidas tan 'froilanianas'. Su reacción al ver a la prensa ha sido de lo más graciosa. En un primer momento se ha dado la vuelta, como quien piensa 'qué pereza'. Intentando esquivar las cámaras, ha cambiado a toda prisa el rumbo de sus pasos. Pero no lo ha conseguido.
Aún hay más. En un arranque de espontaneidad, -tan propia de su personalidad-, se ha ocultado tras un parquímetro. El que fuera artífice de la patada más famosa propinada en una boda real (la de sus tíos), lo ha vuelto a hacer. Se ha dejado llevar por sus impulsos y ha improvisado un movimiento que provoca la risa de cualquiera. ¡Gloria bendita para nuestros ojos!
Froilán, encantador con la prensa tras su vuelta a España
El joven, muy comunicativo, ha contestado a las preguntas sobre su actual vida en la capital de Emiratos Árabes. También ha hablado de su abuelo y de sus recientes demandas. Ha ofrecido respuestas cortas, pero lo suficientemente contundentes como para hacernos una idea de cómo se encuentra. No se ha dejado nada en el tintero.
Ataviado con ropa informal, -pantalones de sport y camiseta de algodón-, se le ha visto algo más delgado. Ha perdido algo de peso. Y aún con barba de dos días y el cabello sin arreglar demasiado, tenía muy buen aspecto.
Lo cierto es que desde que se fue a vivir al extranjero se puede apreciar una evolución en él. Poco a poco va madurando. Y así ha quedado reflejado en su reaparición pública. Educado, amable y sin perder las formas, Froilán ha mostrado su mejor cara ante los medios de comunicación.
"Si sabes que estoy... No pasa nada. Todo bien", ha deslizado a las cámaras de la prensa gráfica. Todo ello con buena actitud y bastante disposición para hablar.
Sobre el número de días que permanecerá en España, ha preferido salir por la tangente: "Tendréis que averiguarlo".
"Perfecto", dice sobre Juan Carlos I 6o396c
Eso sí, cuando han surgido cuestiones sobre su abuelo ha ido directo al grano. Con un "muy bien, perfecto" ha zanjado el tema de la demanda de su abuelo, el rey Juan Carlos (87), a Miguel Ángel Revilla (82).

Froilán, con su hermana Victoria Federica, en la plaza de toros de Las Ventas, en diciembre de 2024. GTRES
Cabe recordar que a principios del pasado mes de abril se supo que el emérito emprenderá acciones legales contra el político cántabro por las "expresiones injuriosas" que este habría expresado sobre el monarca entre 2022 y 2025 "en distintos medios de comunicación".
A sus iniciativas contra Revilla se suma a la demanda que Juan Carlos I prepara contra Corinna Larsen (61). Considera que las acusaciones que la alemana, antes amiga íntima, ha lanzado contra él atentan contra su honor.
Las (buenas) maneras de Froilán 1t721a
"No lo sé, tú lo sabes mejor que yo", añadía respecto a la posible reacción del Revilla al movimiento de su abuelo. "Vosotros sabéis más que yo siempre".
La última vez que se vio a Froilán en nuestro país fue en diciembre de 2024. Entonces asistió al festival taurino y solidario Madrid torea por Valencia, a beneficio de los afectados por la DANA. Una faena que se celebró en el Palacio de Vistalegre. Y a la que fue en compañía de su madre y de su hermana, Victoria Federica (24).
Lejos de las reacciones de enfado y contrariedad de anteriores ocasiones, Froilán ha estado moderado en sus palabras y en sus maneras. Podría decirse incluso que mostraba cierta colaboración con los periodistas. Consciente por una vez del interés que despiertan sus movimientos y su figura dentro de la Familia del Rey.
Aunque, claro, el chico tiene su carácter. También sus límites. Cuando ha considerado que era el momento de poner fin a las preguntas no ha dudado en decir basta: "Venga, pórtate... ¿Cuánto vamos a estar aquí? ¿Hasta que dé la noche?", ha espetado.