
Los dos hermanos y el Bar Plaza 15 de La Pedraja de Portillo Fotografía cedida a EL ESPAÑOL de Castilla y León 4b5t57
De ayudar a sus padres a abrir su bar en un pueblo vallisoletano: Víctor y Gustavo triunfan con sus cafés y gambas 16733u
Los dos hermanos están al frente de un establecimiento hostelero que busca dar lo mejor a sus clientes desde hace diez años. x5gk
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La Pedraja de Portillo es un municipio vallisoletano que se ubica a unos 22 kilómetros de la capital provincial y que está localizado en la llanura de Tierra de Pinares.
Cuenta, en la actualidad y según los datos del Instituto Nacional de Estadística, con una población de 1.175 habitantes.
Allí, tanto Víctor Antonio como Gustavo Martín González, cuentan con un bar que tiene diez años de vida y que lleva el nombre de Plaza 15. Con una amplia experiencia hostelera, después de haber ayudado a sus padres, están al frente del que ahora es su negocio.
Dos hermanos, mano a mano, con la ayuda de otros trabajadores en los momentos en los que más trabajo hay, que intentan sacar adelante, de la mejor forma posible, su trabajo para dar el mejor trato a sus clientes.

Imagen del Bar Plaza 15 en la Pedraja de Portillo
Dos hermanos y una vida 2x46f
“Somos dos hermanos que llevamos trabajando muchos años en el sector de la hostelería donde intentamos hacer las cosas lo mejor posible”, asegura, en declaraciones a EL ESPAÑOL de Castilla y León, Víctor Antonio Martín González.
Gustavo, su hermano, añade que se definen como “dos personas que tratamos a los clientes del bar con el fin de que se sientan lo más cómodos posible” para que tengan una gran experiencia en el Plaza 15 de La Pedraja de Portillo.
Los dos hermanos, de 55 años Víctor Antonio y de 51 Gustavo, llevan prácticamente toda la vida en el mundo de la hostelería y son amantes de los deportes, a la música, de los caballos y los toros. “Si es compartido con familiares y amigos, mejor”, añaden.
Llevan toda la vida en el lugar y recuerdan su infancia “en la calle” como todos los niños de la época en el pueblo y con un balón siempre en los pies.
“Cuando teníamos entre 10 y 12 años, nuestros padres abrieron un bar y, desde entonces, compartimos los juegos con los amigos con ayudar en lo que podíamos”, añaden nuestros entrevistados.
Ambos señalan, en declaraciones a este periódico que, cuando eran pequeños, “ayudaban a los padres en lo que podían” pero que “su intención no era seguir con el negocio familiar”.
Sin embargo, la hostelería sigue siendo su vida.
Dando continuidad y ofreciendo algo nuevo 393650
“La puerta de la hostelería siempre ha estado abierta, pero, sobre el año 2002 es cuando nos hacemos cargo del negocio familiar e intentamos mejorar sobre la base que ya había”, explican.
El Bar Plaza 15 abre sus puertas en octubre de 2015. Los dos hermanos crearán un establecimiento hostelero nuevo que ellos mismos califican como “mucho más moderno, cómodo y amplio”.
“Para nosotros significaba algo muy importante y teníamos una gran ilusión por conseguir un bar como este, que se ubica en la plaza de la iglesia, y que abrimos hace 10 años”, apuntan nuestros entrevistados.
Una ubicación perfecta para un establecimiento hostelero que cuenta con unos 100 metros cuadrados. Son ellos dos los que trabajan en el lugar y cuenta con extras en distintos días y descansos.
Una amplia oferta para sus clientes 4n3816
“Ofrecemos cafés, desayunos, vinos, copas y todo lo que se pueda demandar en cualquier cafetería, excepto cocina, que solo la trabajamos en el vermú del domingo”, asegura Gustavo.
Sobre la especialidad del lugar, Víctor Antonio afirma que es algo que “tendrán que decir los clientes” pero añade que “en pocos lugares te tomas un café como en nuestra casa” y ensalza el sabor de sus gambas rebozadas.

Pinchos del Bar Plaza 15 en La Pedraja de Portillo
Gambas que pelan, rebozan y fríen, una por una, con total dedicación y con el fin de que los clientes disfruten de las mismas.
Sobre lo complicado que resulta sacar adelante un negocio en un municipio de 1.175 habitantes en el que, en verano, hay hasta siete lugares diferentes para tomarse una cerveza, señalan que “o haces las cosas medio bien o mal vas”.
“Mirando al futuro, nosotros seguiremos la misma línea, adaptándonos a la demanda como hemos trabajado toda la vida. El objetivo pasa por mantenerse ahí y no perder nunca la ilusión”, finalizan los hermanos.