Un interno agrede un funcionario en Villena: "No son hechos aislados" 5e3f22

Un interno agrede a un funcionario que acaba necesitando atención médica. Esa es la denuncia que lanza el sindicato UGT sobre un caso que ha ocurrido este miércoles en el Centro Penitenciario de Villena, en el interior de la provincia de Alicante.

UGT explica que los hechos han sucedido en el departamento de aislamiento, cuando los funcionarios de servicio procedían a acompañar a un interno a su salida reglamentaria al patio.

Ahí, según este relato de los hechos, el interno se abalanzó, sin previo aviso, sobre los trabajadores, insultándolos, profiriendo amenazas y tratando de agredirles.

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La denuncia señala que uno de los funcionarios recibió un fuerte golpe en el pómulo que requirió atención médica. El jefe de servicios, junto con otros funcionarios, se personó rápidamente en el módulo y lograron controlar la situación a pesar del alto nivel de agresividad del interno.

El sindicato ACAIP-UGT denuncia que este tipo de hechos no son aislados. Prueba de ello es que consideran que el número de incidentes registrados en el centro penitenciario de Villena es alarmante.

En esa línea critican que la dirección del centro ha adoptado una línea de gestión que desatiende la realidad. Según eso, da lugar a una separación interna de los reclusos que no responde a criterios de idoneidad. Y esto provocaría, según afirman, una convivencia difícil en los módulos que impediría el desarrollo adecuado de las actividades de tratamiento.

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El sindicato recuerda que en 2024 se registraron 238 incidentes entre internos, de los cuales 105 acabaron con lesiones de diversa consideración, y 11 funcionarios fueron agredidos en el mismo periodo.

Estas cifras las definen como inaceptables, porque aseguran que ya se ha advertido a la dirección del centro sobre la necesidad urgente de aplicar criterios de clasificación ajustados al perfil real de los internos.

Y así concluyen denunciando que la búsqueda de resultados estadísticos maquillados no puede prevalecer sobre la seguridad y el bienestar tanto de los trabajadores como de las personas privadas de libertad. Por eso exigen un cambio de rumbo en la gestión del centro y un compromiso firme por parte de la directora con los profesionales penitenciarios, con el objetivo de revertir una situación cada vez más insostenible.