Francisco Rosero, endocrino: "Una tacita de lentejas en España todos los días reduce el riesgo de infarto e ictus" 6f415c

Las legumbres nos recuerdan irremediablemente a las recetas más tradicionales de España, pero no debemos asociarlas con el pasado. Precisamente, las legumbres deberían volver a tener la importancia en la dieta que tenían en la época de nuestros abuelos. Se trata de la fuente más importante de proteínas vegetales que se encuentra en la naturaleza y, además, se han encontrado múltiples beneficios en ellas en estudios científicos recientes. 

En este sentido, el médico endocrino Francisco Rosero ha compartido en su perfil de Tik Tok un vídeo en el que da tres razones fundamentales por las que deberíamos tomar más este tipo de alimentos. "La primera razón es que consumir frijoles, lentejas, garbanzos o cualquier leguminosa ayuda a mejorar el perfil lipídico, disminuyendo los valores de colesterol LDL y mejorando los valores de triglicéridos y de colesterol HDL", explica Rosero.

Este efecto de las legumbres que explica el endocrinólogo se debe, principalmente, al gran aporte de fibra alimentaria que contienen las legumbres. Cuando esta fibra circula por el sistema digestivo es capaz de atrapar el exceso de grasa saturada de los alimentos que hemos consumido. De esta manera, el cuerpo absorbe una cantidad menor y se evita el aumento en los valores de colesterol en sangre.

"Por supuesto, esto se traduce en reducción del riesgo cardiovascular", explica el experto. Tal y como explica la Universidad de Harvard en su página web, el consumo de legumbres está relacionado con la reducción de los factores de riesgo de enfermedad cardiovascular: "Se relaciona con menos riesgo de obesidad, diabetes, hipertensión, colesterol alto, infartos e ictus", y añaden que también ayudan a quien ya padecen estos factores a mejorarlos.

Rosero continúa señalando que "en segundo lugar, comer frijoles ayuda a reducir la glucosa. Sí, así como lo oyes, porque tienen enzimas o componentes bioactivos que degradan la alfa amilasa, que es una enzima que degrada carbohidratos que hace que suba más rápido la glucosa. De esta manera no vamos a tener picos de glucosa ni de insulina". También la fibra de la legumbre es capaz de retrasar la absorción de azúcares.

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Es decir, la fibra que introducimos en nuestro organismo contribuye a que la digestión sea más lenta y, de esta manera, también se reducen o se suavizan los picos de glucosa en el torrente sanguíneo. La fibra también actúa de la misma manera que con el colesterol: cuando se encuentra con ella en el sistema digestivo es capaz de atraparla y evitar que el organismo absorba buena parte de ella. 

"Y la tercera razón es que tienen poderosísimos efectos antiinflamatorios, moderando la respuesta interleuquina 6 y necrosis tumoral", explica Rosero. "¿Quieres más razones para comer frijoles y lentejas? Definitivamente es un elemento fundamental en el día a día. ¿Y cuánto deberíamos consumir? Es muy sencillo, más o menos 60 gramos al día, con 400 gramos a la semana se reduce el riesgo de enfermedad cardiovascular y cerebrovascular".

Predicador Malvado Flickr.

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Para que nos hagamos una idea, el endocrinólogo explica que "60 gramos equivalen a una tacita todos los días de frijoles, lentejas, garbanzos, blanquillos, soja o cualquier otra leguminosa". Las legumbres, aunque no lo creas, también son capaces de ayudarnos a adelgazar. A pesar de que son muy calóricas, aportan un gran número de nutrientes y son capaces de hacernos sentir saciados.

"Y se me olvidaba, por último, tienen un efecto saciante maravilloso. Nos ayudan a controlar los impulsos de comer comida porquería", explica Rosero. Es decir, después de comer un plato de legumbres, somos menos propensos a comer algún plato hipercalórico y con pocos nutrientes. De esta manera, terminamos por ver nuestra salud y nuestro peso corporal mejorar.