¿Es el año 2025 un buen momento para invertir en el sector inmobiliario? Es una de las preguntas que más se hacen los españoles en estos momentos. Sin embargo, lo cierto es que no tiene una respuesta rotunda. Depende del capital del que dispongamos, de la zona en la que nos encontremos y de aquello que queramos encontrar en el sector.
Puede ser que busquemos una gran inversión y que por lo tanto adquiramos una propiedad para después ponerla en alquiler o, simplemente, para intentar venderla un poco más cara y así quedarnos con ese margen de beneficio que nos da la diferencia. Sin embargo, hay otras personas que se lanzan al mercado por la necesidad de encontrar una vivienda. De hecho, cada vez se accede más a alquileres que a compras. Generalmente, no se dispone de dinero suficiente para este fin.
Por ello, la mayoría de las personas que realizan estos movimientos necesitan pedir un préstamo al banco ya que no disponen de capital suficiente al contado. Sin embargo, para adentrarnos en este universo tenemos que conocer una serie de factores que marcarán la diferencia de manera poderosa. A pesar de lo que pueda parecer, algunos especialistas estiman que el 2025 es un año para atrevernos con este tipo de proyectos aunque la situación sea más complicada. Sin ir más lejos, en el inicio de este curso, los alquileres han subido más de un 15%.
Uno de esos casos de expertos que recomiendan intervenir en estos momentos es Gonzalo Bernardos, quien asegura que estos meses son un buen momento para lanzarnos a un proyecto de este tipo mediante un proceso de financiación porque el sector está lleno de oportunidades. Es lo que se define como "un buen periodo para el mercado hipotecario".
Sin embargo, para no equivocarnos en este proceso, conviene seguir los consejos de este tipo de expertos. El profesor de Economía de la Universidad de Barcelona ha hecho una de sus habituales apariciones en el programa Más vale tarde de laSexta para explicar qué fenómenos está experimentando sobre todo el mercado del alquiler. Una de las principales cuestiones es que cada vez más personas se ven resignadas a adoptar este tipo de formas de vivienda porque tienen imposible adentrarse en la difícil misión de adquirir una vivienda por los elevados precios.
¿Qué va a pasar con el alquiler en España? q3b4l
Gonzalo Bernardos tiene muy claro qué está pasando en España. Y es que las necesidades de la población han cambiado. O incluso, mejor dicho, las posibilidades. Mientras que antes la prioridad era comprar una vivienda, ahora eso queda tan lejano que uno solo persigue un mejor alquiler. "Hay más personas itinerantes, los jóvenes desde 2008 hasta ahora prácticamente no han comprado vivienda, y la demanda no se ha visto compensada con un incremento de oferta".
Sobre quién tiene la culpa, Bernardos lo tiene claro: dispara contra el Gobierno. Y es que asegura que seguir la política de vivienda impulsada por Sumar es una medida "populista" que no tiene sentido. "Lo que ha hecho es generar inseguridad al propietario. Tiene hoy pánico inmobiliario a que el inquilino se declare vulnerable. Esto provoca que la oferta disminuya".
El concepto de pánico inmobiliario es tan interesante como alarmante. Y explica perfectamente cómo se encuentra el sector y el mercado. Además, Bernardos va más allá y critica los elevados precios que marcan el ritmo en zonas como Madrid o Cataluña. Pide a los clientes que no estén dispuestos a pagar por encima del precio del mercado, ya que se crea una bola de nieve imparable. "Asistimos a otro fenómeno: el del arrendatario desesperado. Entran en las oficinas y piden que les den una vivienda para alquilar, y están dispuestos a pagar de más".
Por último, este experto en vivienda tiene claro que las autoridades lo que deben perseguir es la seguridad jurídica para los propietarios e incentivarles a comprar vivienda para que esta después sea alquilada o revendida. Es decir, que haya un movimiento sano en el mercado. "El precio del alquiler subirá menos e, incluso, puede llegar a bajar".
A pesar de tener más o menos claro cuál puede ser un camino hacia la solución, la dureza de la situación hace que el propio Bernardos vea el vaso medio vacío: "Vamos a ver a la gente viviendo en rulotes. Se van a forrar los que alquilan habitaciones y los zulos van a ser buscadísimos".