Publicada

Hacer la Declaración de la Renta en España puede parecer, año tras año, una montaña a escalar. Sin embargo, si sabes por dónde empezar y qué aspectos revisar con lupa, el proceso puede volverse mucho más sencillo, e incluso darte alguna alegría.

La inteligencia artificial (IA), que trabaja con datos, patrones y análisis constantes, tiene claro que el mayor error es confiarse demasiado y dejarlo todo para el último momento.

Por eso, si se está a punto de enfrentar la campaña de la renta 2024, que se presenta en 2025, es recomendable tomarse un momento para organizarse, revisar cada detalle y asegurarse de no dejar fuera deducciones que podrían suponer un ahorro importante.

Las claves según la IA  2o2c63

El primer consejo, aunque parezca básico, es no lanzarse a presentar el borrador en cuanto esté disponible. La Agencia Tributaria pone a disposición el borrador desde el 2 de abril, pero en muchos casos la información no está completamente actualizada en esos primeros días. 

Esperar al menos un par de semanas puede cambiarlo todo: por ejemplo, los datos sobre planes de pensiones, cuotas sindicales, o incluso la información sobre hipotecas y alquileres pueden cargarse tarde.

Otro aspecto fundamental que suele pasarse por alto es el de las deducciones. Muchas de ellas no aparecen de forma automática en el borrador y hay que introducirlas manualmente.

Un ejemplo claro es la cuota sindical, que puede deducirse entre un 20% y un 35% dependiendo del tramo. Esta información se introduce en la casilla 0014, dentro del apartado de rendimientos del trabajo, y puede significar decenas o incluso cientos de euros en la devolución.

También es habitual olvidar las deducciones por donativos a ONGs, por la inversión en vivienda habitual (si te queda derecho adquirido), o por las obras para mejorar la eficiencia energética, que muchas comunidades autónomas han incentivado.

Otro consejo clave es no confiar únicamente en lo que aparece reflejado en tus ingresos. Hacienda ya dispone de bastante información, pero si tienes más de un pagador, has cobrado alquileres, has realizado actividades como autónomo o incluso has obtenido ingresos por plataformas digitales o criptomonedas, es tu responsabilidad declararlos.

Este año, en particular, la Agencia Tributaria ha avisado de que pondrá especial atención a los ingresos de plataformas colaborativas y redes sociales, así como a las operaciones con criptoactivos.

Si has tenido este tipo de ingresos, es importante asegurarse de reflejarlos correctamente en las secciones correspondientes, especialmente en el apartado de 'Rendimientos de actividades económicas' o 'Ganancias patrimoniales derivadas de transmisiones'.

En cuanto a la elección entre declaración conjunta o individual, la recomendación que ofrece la IA es la de hacer una simulación de ambas modalidades antes de decidir. Hay situaciones, sobre todo en parejas con hijos o con diferencias notables de ingresos, en las que puede suponer una diferencia significativa.

Esta opción no cuesta nada comprobarla en Renta WEB y puede evitar pagar de más o recuperar menos. Realizar una simulación permite conocer cuál de las dos opciones es más favorable para cada situación personal y financiera.

Deducciones autonómicas 6a683s

Además, es importante consultar si la comunidad autónoma ofrece deducciones específicas, ya que muchas veces no aparecen en el borrador y deben introducirse manualmente. Por ejemplo, algunas comunidades permiten deducir gastos en material escolar, guardería, alquiler de vivienda habitual o incluso por tener personas mayores o dependientes a tu cargo.

Esta información puede encontrarse en los apartados autonómicos de la declaración, y cada región tiene sus propias casillas y condiciones. Aprovechar estas deducciones adicionales puede reducir considerablemente la carga tributaria, por lo que es importante revisar bien esta sección antes de finalizar la declaración.

Y, por supuesto, es importante mantener todos los justificantes. Se deben guardar, al menos durante cuatro años, todos los documentos que respalden la declaración: facturas, recibos, certificados de retenciones y cualquier otro documento utilizado para deducir gastos o justificar ingresos.

Estos justificantes son esenciales en caso de una revisión o auditoría. Mantener todo en orden y debidamente archivado evitará posibles inconvenientes si se cuestiona algún detalle de la declaración.

De esta forma, presentar bien la declaración no es solo cuestión de cumplir con una obligación legal, sino también una oportunidad para optimizar tu situación fiscal.

Aunque la opción de aceptar el borrador de la declaración con solo unos clics resulta tentadora, dedicar tiempo adicional para revisar minuciosamente cada dato y asegurarse de las deducciones aplicables puede marcar la diferencia.