El diente de cachalote hallado en Valencina en manos del investigador Fernando Muñiz durante los trabajos de estudio. FERNANDO MUÑIZ/CEDIDA 6p4m3r
Del fondo del mar a un colegio de Valencina: descubren un "excepcional" diente de cachalote en Sevilla 3b4t3l
Recogido por alguna comunidad de la época, fue manipulado y utilizado con fines simbólicos, hasta ser depositado intencionadamente como una ofrenda votiva. g6a6m
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Sevilla ha sido sede de uno de los mayores descubrimientos de la Península. Un equipo internacional de investigadores ha documentado el hallazgo de un "extraordinario" diente de cachalote en el emblemático yacimiento calcolítico de Valencina de la Concepción, en la provincia de Sevilla.
El descubrimiento se ha producido, concretamente, en el recinto del antiguo instituto Las Encinas, donde se construye la nueva biblioteca municipal.
Se trata de un descubrimiento sin precedentes en la Península Ibérica vinculado a la Prehistoria Tardía, y el primero de este tipo en el conocido enclave arqueológico de Valencina y Castilleja de Guzmán.
El estudio, titulado Desde las mandíbulas de Leviatán: Un diente de cachalote del mega sitio de la Edad del Cobre de Valencina, ha sido desarrollado por especialistas de la Universidad de Sevilla, el Instituto Español de Oceanografía, el CSIC, el Instituto Arqueológico Alemán y las universidades de Córdoba, Huelva y Durham (Reino Unido), entre otras instituciones.
Asimismo, la investigación ha sido firmada por trece expertos, entre ellos Samuel Ramírez-Cruzado, Miriam Luciañez-Triviño, Fernando Muñiz Guinea y Leonardo García Sanjuán.
La pieza apareció en un hoyo no funerario durante las excavaciones arqueológicas realizadas en el verano de 2018, promovidas por el Ayuntamiento de Valencina. Actualmente, el diente se conserva en el Museo Municipal de la localidad.
Con 13,2 centímetros de longitud y 414 gramos de peso, corresponde a la mitad superior de un colmillo incompleto de cachalote adulto y se encuentra en un notable estado de conservación, pese a su antigüedad, datada en los siglos finales del tercer milenio antes de nuestra era.
Arrastrado por la marea 503l2u
Los análisis tafonómicos, paleontológicos y contextuales, incluyendo modelado fotogramétrico en 3D, revelan que el diente pasó un tiempo en el fondo marino —como indican sus marcas de bioerosión— y fue arrastrado probablemente a la costa por una tormenta o marea.
Recogido por alguna comunidad de la época, fue manipulado y utilizado con fines simbólicos, hasta ser depositado intencionadamente como una ofrenda votiva.
"Se trató como un objeto sagrado o totémico", explican los autores, quienes destacan que el diente llegó al asentamiento como un bien exótico, al igual que otras materias primas de alto valor simbólico halladas en la zona como el marfil, el ámbar o el cristal de roca.
Esta interpretación lo vincula con otros artefactos valiosos localizados en contextos no funerarios del gran enclave prehistórico. El hallazgo subraya la importancia del mar en la cosmovisión de las comunidades que habitaron el Aljarafe sevillano en la Edad del Cobre.
Además, refuerza el valor arqueológico del denominado "mega sitio" de Valencina y Castilleja de Guzmán, un yacimiento que se extiende sobre 450 hectáreas y cuya cronología abarca del 3200 al 2300 antes de nuestra era (a.n.e.). Desde 2010, una parte sustancial del entorno está protegida como Zona Arqueológica, si bien sectores científicos reclaman ya su ampliación.
Este descubrimiento, expuesto recientemente en unas jornadas divulgativas en Valencina, consolida la singularidad del yacimiento y aporta una nueva e inesperada pieza al complejo puzle de las sociedades prehistóricas del suroeste peninsular.
