
'Hombro congelado', un dolor articular que afecta en mayor porcentaje a las mujeres mayores de 50. iStock 1s481t
'Hombro congelado': cómo tratar esta inflamación articular que afecta a las mujeres a partir de los 50 años 6w322p
Los cambios hormonales provocados por la menopausia desgastan la salud articular, provocando esta afección que puede revertirse sin cirugía. 28l1c
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Cumplir 50 años viene acompañado por varios cambios en el cuerpo. Estos, ligados a las fluctuaciones hormonales por la entrada en la menopausia, traen consigo otros tantos efectos que impactan de manera directa en la salud muscular, ósea y de las articulaciones.
Se estima que "más del 50% de mujeres experimentan dolor articular durante la menopausia", señala el doctor José Antonio Márquez, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica en el Hospital Quirónsalud Clideba.
Un ejemplo puntual del dolor focalizado son los hombros. Sentir rigidez, dolor y dificultad de mover la articulación son síntomas inequívocos de estar padeciendo una enfermedad llamada capsulitis adhesiva.
El médico especialista del Hospital Quirónsalud Clideba desvela los detalles de la inflamación que provoca tal molestia conocida popularmente como 'hombro congelado' y si es posible revertirla con el fin de mejorar la calidad de vida de las mujeres a largo plazo.
'Hombro congelado' 4z2a6x
Su nombre real es capsulitis adhesiva, aunque popularmente se le conoce como 'hombro congelado' por el resultado que produce sobre la articulación.
Esta afección "es un proceso inflamatorio muy limitante que cursa con mucho dolor y rigidez del hombro. Con el paso del tiempo se genera gran dificultad para moverlo", define el doctor Márquez.

José Antonio Márquez, especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica en el Hospital Quirónsalud Clideba.
"El hombro tiene una envoltura de tejido conjuntivo fuerte llamada cápsula articular que rodea la articulación, estando lubricado por el líquido sinovial. En el hombro congelado esta se espesa y endurece. Se desarrollan bandas rígidas de tejido, llamadas adherencias y disminuye el líquido sinovial", detalla el especialista sobre el desarrollo de la enfermedad.
El primer aviso que emite el cuerpo sobre esta dolencia es "la incapacidad para moverlo, ya sea activamente, es decir, por sí mismo, o pasivamente, con la ayuda de otras personas", señala.
El proceso del paciente cursa tres fases:
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Fase inicial o inflamatoria. Se desarrolla entre dos y nueve meses y presenta mucho dolor.
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Fase intermedia o congelación. Entre los cuatro y los doce meses posteriores, el dolor es menor, pero también se limita la movilidad.
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Fase de resolución o descongelado. Con ella acaba la patología, resolviendo el dolor y recuperando la movilidad, dura hasta 12 meses.
La manera de evitar llegar a ese punto crítico es comenzar con la prevención temprana. Una prescripción de calcio y vitamina D para mejorar la densidad ósea ayudará.
También el llevar una vida activa implementando la práctica de estiramientos y ejercicio diario que permita mover las articulaciones de los hombros en todo su rango de movimiento. El yoga, el thai chi y el pilates son disciplinas que ayudan a ello.
Causas y diagnóstico 5dz1t
Entre los factores que predisponen dicha afección destacan la diabetes, enfermedades endocrinas e inmovilizaciones prolongadas tras una cirugía. "Aunque habitualmente se desarrolla en personas sin ninguna patología", confirma el doctor.

El 'hombro congelado' se diagnostica a través de una exploración en consulta, como en la imagen.
El diagnóstico de la enfermedad se hace en consulta a través de la exploración clínica. Esta "nos demuestra una movilidad del hombro muy limitada, debemos fijar la escápula con nuestra mano, ya que a veces hay una falsa movilidad por la basculación de esta, y si la fijamos se comprueba que la articulación gleno-humeral está bloqueada".
Además, el especialista completará el diagnóstico con una Resonancia Magnética Nuclear: "La RMN nos confirmará el engrosamiento capsular y descartará otras patologías del manguito o húmero".
"Es inusual que el hombro rígido se repita en el mismo lado. Sin embargo, en algunas personas puede aparecer en el otro, generalmente en un lapso de cinco años", incide el doctor sobre esta dolencia, recordando la importancia de la prevención y diagnóstico a tiempo.
Tratamiento no quirúrgico 2m1469
Las opciones de tratamiento no quirúrgico para abordar el 'hombro congelado' pasan por la infiltración con anestésico local y corticoide intraarticular.
"Es efectiva para quitar el dolor inflamatorio severo de la fase inicial, cuando la paciente refiere que no puede dormir ni soportar las maniobras del fisioterapeuta por ser muy dolorosas", prescribe.
A partir de la resolución del dolor e inflamación inicial, la paciente comenzará a recuperar su vida habitual. A través del trabajo con el fisioterapeuta se empezará a desbloquear el hombro hasta ganar movilidad de manera progresiva.
Cirugía y recuperación 5h282y
Si bien la cirugía no es necesaria en la mayoría de los casos, cuando la capsulitis está muy avanzada se debe recurrir a ella. También en pacientes diabéticos: "En estos los corticoides suponen descompensación de la hiperglucemia".
En otros casos, simplemente se estanca la evolución a pesar de la fisioterapia y se recomienda someterse a una artrólisis artroscópica:
"Es una técnica de mínima invasión, con dos pequeños orificios, uno para la visión óptica, y otro para la instrumentación, con ayuda de un instrumento llamado vaporizador, vamos seccionando la cápsula articular, saliendo de quirófano con el arco de movilidad completo".
La intervención de los profesionales acorta los tiempos de evolución del 'hombro congelado'. El posterior trabajo de rehabilitación será fundamental para alcanzar una recuperación completa.
La terapia con frío-calor y cumplir con la tabla de ejercicios recomendados en consulta son el camino para descongelar la articulación y no reincidir.