
Cosmética antimanchas en verano: cómo evitar la hiperpigmentación. Pexels 1v5p49
¿Cosmética antimanchas en verano? Esta es la manera segura de incluirla y prevenir la hiperpigmentación 4p5wa
Combatir este signo de la edad y daño celular no es un trabajo exclusivo del invierno. Actúa ya y evítalo así, según expertos en el cuidado de la piel. 2b2nn
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La mejor medida antiedad es la prevención. También cuando tratamos de evitar las manchas en el rostro, uno de los signos más visibles del daño celular y la oxidación, y al que no siempre conseguimos anticiparnos.
Si hablamos en términos de medicina, las manchas del rostro son el resultado de una hiperpigmentación a causa de un aumento localizado de melanina, el pigmento responsable del color de nuestra piel.
Estas manchas pueden variar en tamaño, forma y tonalidad, y "aunque normalmente no indican nada grave, es importante analizarlas, ya que es posible que haya que tratarlas", recomiendan desde SkinCeuticals.
El estudio 'Evolución del mercado de la farmacia española' indica que a una de cada tres mujeres en España le preocupa este problema de hiperpigmentación. No por nada existen decenas de miles de tratamientos y cosmética enfocada a evitar su aparición o, en su defecto, revertirlas.
Los cambios hormonales, el envejecimiento e incluso la genética son causas y factores desencadenantes de la aparición de las manchas faciales.
Si bien sobre algunos no podemos actuar, pues vienen del interior de nuestro organismo, existe un factor condicionante sobre el que sí vamos a intervenir (y mejorará todos los demás).
Manchas solares: causas y tipos 1t6kv
La hiperpigmentación facial puede venir provocada por factores externos, pero también internos. Entre los más reconocidos destacan:
- Genética. La predisposición a desarrollar manchas puede venir influenciada por una herencia en nuestros genes, por ejemplo, en el caso de las pecas, como señalan los expertos de Cantabria Labs.
- Cambios hormonales como el embarazo, la menopausia o el uso de anticonceptivos pueden desencadenar la hiperpigmentación.
- Envejecimiento. Con el paso de los años la producción de melanina se vuelve irregular, favoreciendo así la aparición de manchas.
- Medicamentos y enfermedades. Anticonceptivos, antibióticos o antidepresivos, así como el acné, pueden crear esta irregularidad de tono en la piel.
- Exposición solar. Si bien es el último de la lista, es el factor más frecuente y sobre el que más poder de actuación tenemos. La radiación ultravioleta estimula la producción de melanina y puede provocar esta pigmentación irregular en las zonas más expuestas, como bien puede ser el rostro.
A consecuencia de estos desencadenantes, las manchas que pueden aparecer van desde las inocentes y 'adorables' pecas, hasta el fastidioso melasma o los lunares a los que debemos poner especial atención a su evolución.
Identificar a qué tipo nos enfrentamos, ayudará a tratarla en caso de que sea posible:
- Lentigos solares. Se conoce así a las pequeñas manchas marrones pequeñas y bien delimitadas que aparecen asociadas a una exposición solar crónica, también al envejecimiento.
- Melasma. Afecta principalmente a mujeres en edad fértil, se agrava por el sol así como por los cambios hormonales y presenta una tonalidad amarronada o grisácea, con forma irregular.
- Pecas y lunas. Su origen es genético, y "su aparición se debe a una distribución desigual de la melanina, es decir, en lugar de repartirse de manera uniforme, lo hace formando pequeños grupos", detallan desde Cantabria Labs.
- Hiperpigmentación postinflamatoria. Aparece tras brotes de acné o lesiones en la piel.
Si bien en la mayoría de los casos en los que se presenta esta hiperpigmentación no va ligado a un riesgo para la salud, es importante consultar con un dermatólogo para asegurar un diagnóstico benigno.
Confirmado esto, y si la presencia de manchas en nuestro rostro nos incomoda por cuestiones estéticas, existen maneras de tratarlas.
Cosmética 'antimanchas' en verano 6t7021
El abordaje para eliminar las manchas faciales va a depender del tipo de mancha, el origen y la profundidad. Pero también de la época del año en la que nos encontremos.
En verano debemos llevar especial cuidado con aquello que aplicamos sobre la piel, pues podría ser contraproducente.
Partiendo de la prevención y del gran desencadenante de ellas (la exposición solar), incorporar un fotoprotector físico con SPF50 será el primer paso de una rutina antimanchas efectiva.
Este tipo de cosmético actúa como una barrera frente a la radiación, impidiendo que penetre en la piel y, por consiguiente, que la melanina no se active. Para garantizar su efectividad, no olvides reaplicarlo a lo largo del día.
La vitamina C será otro gran aliado en nuestra rutina de verano. Su poderosa acción antioxidante bloquea la síntesis de melanina, protegiendo así la piel del daño oxidativo.
Es seguro aplicarla durante el día siempre que se combine con un cosmético fotoprotector y, además, potenciará la eficacia de otros activos despigmentantes a la vez que evita la aparición de nuevas manchas.
La niacinamida, conocida por su poder sebo regulador, también está recomendada durante los meses de sol para las personas que quieren frenar la hiperpigmentación, pues aclara el tono. Apta para todo tipo de pieles, cuenta con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, podrás usarla día y noche.
Y si quieres ir un paso más allá, y no limitar tu rutina antimanchas de verano a la prevención de la aparición de nuevas, sino tratar en profundidad las ya existentes, esta lista de principios activos aclarantes son seguros y efectivos, también bajo el sol:
El ácido kójico, capaz de inhibir la enzima tirosinasa, clave en la producción de melanina, podrás emplearlo en concentraciones por debajo del 1% para tratar melasma y manchas de sol. Preferiblemente, úsalo de noche y aplicando un fotoprotector de amplio espectro al día siguiente.
El ácido tranexámico también gana popularidad en estos meses a la hora de maximizar los resultados de los tratamientos antimanchas en cabina, así como para evitar la aparición de otras nuevas.
Inhibe la tirosinasa y tiene efecto antiinflamatorio, además de ser seguro su uso tanto de día como de noche. Las personas con melasma encontrarán en él un gran aliado a largo plazo.
Por último, el extracto de regaliz, el gran desconocido. Su suavidad lo convierte en el activo ideal para tratar las manchas en las pieles más sensibles (o expuestas al sol).
Contiene glabridina, un compuesto que inhibe la producción de melanina. "Ofrece un potente efecto antioxidante y calmante, aclarando la piel y previniendo la formación de arrugas y pigmentación", confirman desde Ringana.