La segunda ballena más grande del mundo que se ha visto en Málaga.

La segunda ballena más grande del mundo que se ha visto en Málaga. @malagasequeja

Benalmádena

La segunda ballena más grande del mundo, avistada en Málaga: "Pasan por el Estrecho y se acercan a la costa para comer”

La rorcual común puede llegar a medir 27 metros de largo y pesar hasta 80 toneladas, solo alimentándose de crustáceos, peces pequeños y plancton.

Más información: Un tiburón peregrino se deja ver por la costa de Marbella: “Son animales inofensivos. Pueden llegar a medir 10 metros".

Publicada

El verano está a la vuelta de la esquina. En cuestión de días habrá un cambio de estación y, por ello, hay especies migratorias que comienzan a avistarse en el litoral malagueño, ya que van en busca de aguas más frías y ricas en alimentos como las zonas subpolares del Atlántico Norte o el Pacífico Norte.

De ahí que el pasado fin de semana una rorcual común haya sido avistada frente a la costa de Torrequebrada y Arroyo de la Miel. “La primera vez que veo una ballena”, aseguran los testigos sorprendidos en un vídeo publicado en redes sociales.

En este sentido, Juan Antonio López, director de la Fundación Aula del Mar Mediterráneo, asegura que estos avistamientos son comunes en esta época porque estas especies migratorias van en busca de aguas más frías para poder alimentarse. Además, añade que “pasan por el Estrecho y se acercan a la costa para comer”, por ello se ven durante estos meses en estas zonas del litoral.

Asimismo, hace hincapié en que los rorcuales comunes son la segunda ballena más grande del mundo, solo superada por el rorcual azul, es decir, por la ballena azul. Esto se debe a que pueden llegar a medir entre 20 y 27 metros, siendo los machos algo más pequeños que las hembras. Además, pesan de 40 a 80 toneladas y viven alrededor de 90 años.

El rorcual común se encuentra en todos los océanos del mundo, excepto en las regiones polares más frías. En el Mediterráneo occidental, especialmente en zonas como el Mar de Alborán o el Golfo de León, es una especie presente, de ahí que pueda avistarse durante la primavera y el verano, como en esta ocasión.

Aunque son tan grandes, su dieta se basa en pequeños crustáceos, peces pequeños y plancton. Al igual que el tiburón peregrino, el rorcual común se alimenta por filtración: abre su enorme boca, traga grandes volúmenes de agua y luego la expulsa a través de sus barbas, atrapando el alimento.

Por otro lado, cabe señalar que es una de las ballenas más rápidas que existen, puesto que pueden alcanzar hasta 40 kilómetros por hora en tramos cortos. Suele nadar sola o en pequeños grupos y hace migraciones largas entre zonas de alimentación y reproducción.

En verano se desplazan a aguas frías y ricas en alimento, como las zonas subpolares del Atlántico Norte o el Pacífico Norte. Allí se alimenta intensamente, aprovechando la abundancia de krill y peces pequeños. En cambio, en invierno se decantan por aguas más cálidas, como las zonas subtropicales o tropicales, donde las condiciones son más favorables para reproducirse y parir, aunque allí apenas se alimenta.