Corría marzo de 2019 y a Manuela Carmena le quedaban pocos días como alcaldesa de Madrid. Su grupo, Ahora Madrid, logró aprobar el Plan de Hospedaje con el apoyo del PSOE. La regulación pretendía frenar la conversión de viviendas en pisos turísticos. Más de seis años después de aquello, el Ayuntamiento de José Luis Martínez-Almeida está a punto de enterrar aquella normativa. A juicio de los populares, ha resultado "ineficaz".

El Pleno de Cibeles aprobó de forma provisional este miércoles el Plan Reside, que sustituye al de 2019. La idea es que entre en vigor una vez que reciba el 'ok' de la Comunidad de Madrid.

Tal y como explicó el delegado del Área municipal de Urbanismo, Borja Carabante, el Plan Reside busca incentivar la vivienda residencial y ordenar la oferta turística de alojamientos temporales. Pretende, a modo de resumen, mejorar la convivencia entre los vecinos y los turistas que alquilan pisos turísticos. ¿Cómo? Impidiendo que los turistas y los vecinos de Madrid cohabiten en el mismo edificio.

Para ello, prohibirá las viviendas de uso turístico (VUTs) dispersas en bloques residenciales del centro histórico de la ciudad. Solo las permitirá en edificios exclusivos para ello. Fuera de este perímetro céntrico, solo se concederán licencias en bloques de vecinos a los pisos que estén en sótanos, bajos y primeros. Hay más medidas, cuyas claves contaremos a continuación.

La redacción no ha gustado a la oposición. Vox se abstuvo, acusando al equipo de Almeida de no torcer el brazo en la negociación. El PSOE votó en contra, advirtiendo de que el texto abrirá la puerta a que el 67% de los edificios del centro histórico sea susceptible de convertirse en edificios de VUTs. Más Madrid, líder de la oposición, también lo rechazó y lo bautizó como "Plan Expulsa".

En el 'centro histórico', en bloques enteros 332pj

Con la nueva normativa, Madrid quedará dividida en dos: el citado centro histórico -también conocido como AP001- y el resto de la ciudad. El ámbito AP001 lo forman el distrito Centro al completo, casi todo Chamberí y buena parte de Arganzuela, Retiro y Salamanca. También el barrio de Argüelles (en Moncloa) y parte de El Viso (Chamartín).

Son las zonas donde más VUTs se concentran y más activos residenciales se pierden. Una de las consecuencias del fenómeno -según el Consistorio- ha sido la pérdida de población. El nuevo plan obligará a que los pisos turísticos se aglutinen en edificios completos y exclusivos. No podrá haber ninguno en un bloque residencial, algo que sí ha permitido la 'ley Carmena'.

Si el edificio no es de uso residencial, sí se itirán los pisos turísticos sin limitaciones. Eso sí, salvo los que se encuentran en un amplio listado de vías comerciales principales que se pueden consultar en la página web del Ayuntamiento.

A todo ello hay que sumar una medida 'extra': en calles no terciarizadas, sí que se permitirá que inmuebles residenciales catalogados (con nivel de protección 3) se conviertan durante 15 años en bloques exclusivos de VUTs, siempre y cuando necesiten ser rehabilitados. Una vez cumplidos los tres lustres, volverán a tener un uso residencial.

El aviso del PSOE 3l4h6e

Borja Carabante resumió así el nuevo marco urbanístico: "Queremos que haya pisos turísticos en la ciudad, sin expulsar al vecino". Antonio Giraldo, responsable socialista en la materia, cree en cambio que las medidas son un "llamamiento a los grandes propietarios".

Según sus cálculos, en el centro histórico de Madrid hay 17.839 parcelas edificadas, de las cuales 1.433 no tienen nivel de uso por ser iglesias, edificios istrativos u otras excepciones.

De las restantes 16.406 parcelas construidas en la AP001, 11.968 serían susceptibles de albergar algún tipo de hospedaje turístico con el Plan Reside. Dicho de otra manera: el 67% de los edificios de esta almendra central podrían transformarse en VUTs.

"Desconocemos sus cuentas", contestan fuentes del Área de Urbanismo. "Pero con el Plan de Hospedaje que aprobó la izquierda en 2019 se podía hacer eso, de ahí la proliferación de edificios para pisos turísticos y hoteles en la zona central", agregan.

"Con el Plan Reside se regula, ya que el cambio de uso de residencial a terciario deberá ir acompañado de una reforma integral que tendrá que ser aprobada por el Ayuntamiento de Madrid y solo durante 15 años: después revierte de nuevo a uso residencial", insisten.

¿Y más allá del centro? 2l2ry

Fuera de este anillo central, el Plan Reside sí que permitirá abrir VUTs en edificios de vecinos. Eso sí, siempre que tengan un independiente al portal de los residentes, exigencia que no se contemplaba en la normativa de 2019.

Además, el texto final redactado por el Consistorio desoye la reclamación vecinal que pedía integrar a Tetuán dentro de esta zona más restrictiva. Se despeja así una incógnita que se originó en enero, cuando el propio PP apoyó la propuesta de varias asociaciones para ampliar el 'centro histórico' a Tetuán.

En estos bloques residenciales, las VUTs solo podrán abrirse en la primera planta, en la baja y en la inferior a la baja (salvo en algunas excepciones).

Respecto a las calles comerciales, el Consistorio prohibirá que se transformen locales en VUTs en más de una veintena de ejes (que también se detallan en la web municipal).

Los 210 edificios 'históricos' 2e5t61

El Plan Reside incluye otra medida 'independiente' que persigue recuperar más espacio para el residente. Se trata de un mecanismo que abre la puerta a que los edificios protegidos y "obsoletos" del centro histórico de la ciudad alberguen viviendas con alquileres asequibles y 'colivings'. Hablamos, por ejemplo, de aprovechar como hogares conventos religiosos, sanitarios y educativos.

Actualmente, hay 210 edificios de estas características en el centro histórico de la ciudad. En el borrador, se identificaban, en concreto, 182 parcelas con estas condiciones. Según las estimaciones iniciales, si entre un 5 y 10% dieran el salto a residencial, resultarían entre 800 y 1.600 viviendas.

Sanciones e inspección 1jq48

En abril de 2024, el Gobierno local cerró el grifo a las licencias de VUT ante la proliferación de pisos turísticos ilegales. Más del 90% carecía de título para abrir. Unos 15.000 alojamientos turísticos fuera de la ley. La capital no cuenta con una normativa sancionadora específica para estos casos. Cibeles también ha cambiado su criterio a la hora de multar a las VUTs ilegales. Antes, se imponían multas coercitivas de 1.000, 2.000 y 3.000 euros, siguiendo la Ley 39/2015 de Procedimiento istrativo.

Desde la pasada primavera, se actúa al amparo de la Ley del Suelo de la Comunidad de Madrid, que tipifica como infracción grave la implantación de uso incompatible con la ordenación urbanística. Así, las multas pueden alcanzar hasta los 190.000 euros si el incumplimiento persiste.

A su vez, el Área de Urbanismo defiende su labor inspectora, que empujó en 2024 a que 293 pisos turísticos regresaran al uso residencial. Además, asegura que la Agencia de Actividades, el organismo responsable de tramitar y controlar las licencias y permisos urbanísticos, ha aumentado un 15% su plantilla, con 10 trabajadores más. El PSOE, sin embargo, insiste en que existe un "problema" a la hora de aplicar la "disciplina" porque faltan inspectores.

El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso tendrá la última palabra sobre el Plan Reside. El Consistorio madrileño espera que entre en vigor en los próximos meses.