“Si no eres optimista, has renunciado a la vida” (Peter Thiel). 3d1y35
El acuerdo arancelario entre Estados Unidos y China anunciado el lunes y el buen dato de inflación americano del martes (aumentó al ritmo más lento desde principios de 2021) catapultaron a las bolsas y redujeron las probabilidades de recesión desde el 65% a menos del 40% según Polymarket.
No obstante, el acuerdo no deja de ser una prórroga de 90 días, así que me parece interesante analizar algunos gráficos de Morningstar previos al anuncio para dilucidar cómo afectan dichos aranceles a las acciones tecnológicas.
Según la firma de análisis, ciberseguridad (les gusta Palo Alto) y software (prefieren Microsoft y Adobe) son los subsectores menos afectados. Hardware, semiconductores y Apple son apuestas más arriesgadas:

Estados Unidos importó 3 billones de dólares en bienes en 2023 y aproximadamente el 30% de esa cantidad se relaciona con “maquinaria eléctrica y electrónica” y “maquinaria, aparatos mecánicos y sus componentes”. China fue la mayor fuente de importaciones para ambas categorías, abarcando el 26% de la primera y el 19% de la segunda. Esta perspectiva general subestima la importancia de China en las cadenas de suministro de tecnología:

Es probable que China tenga un impacto aún mayor en las importaciones estadounidenses debido a su alto nivel de comercio con otros socios, que luego exportan a Estados Unidos. Muchos de estos países simplemente realizan el ensamblaje final de productos que, en gran medida, todavía se abastecen en China. Ésta es una de las formas en que China se ha adaptado a los cambios previos en la cadena de suministro:

Al analizar a los vendedores de hardware, consideran que el 60% de los suministros de móviles y ordenadores estarían sujetos a aranceles en China. Creen que los servidores se verían mucho menos afectados, ya que la mayoría de los envíos provendrían de México (libre de aranceles bajo el T-MEC) y Taiwán (veremos dónde terminan los aranceles).
En el caso de los discos duros, la mayoría de las importaciones provienen de Tailandia, mientras que los equipos de red son diversos, con sólo el 10% de las importaciones provenientes de China. La cadena de suministro de móviles sería la más difícil de modificar, al igual que los discos duros, mientras que los servidores y las redes han desarrollado su escala en múltiples áreas fuera de China, lo que podría brindarles mayor flexibilidad.
Motorola es una de las pocas empresas donde ven una mínima exposición a China (tanto en la cadena de suministro para el ensamblaje como incluso en la lista final de materiales) a pesar de ser un proveedor de hardware:

Si bien los semiconductores están técnicamente exentos de aranceles por ahora, hay cierta probabilidad de que se les apliquen aranceles en el futuro. Aun así, los semiconductores no suelen consumirse en su forma original, como circuitos integrados. Muy pocos semiconductores se envían directamente a Estados Unidos. En cambio, los semiconductores son componentes básicos para otros productos, como automóviles, servidores, racks de almacenamiento, televisores, ordenadores, conmutadores de red, sensores industriales, etc. Prevén que todos esos productos finales estarán sujetos a aranceles. Además, el ensamblaje final de la mayoría de estos productos se ha subcontratado, a menudo a China; por lo tanto, muchos productos que contienen semiconductores estarán sujetos a aranceles una vez que ingresen a EEUU. El principal riesgo para los semiconductores es la destrucción de la demanda del mercado final.
Si los semiconductores se gravaran directamente, tendríamos que ver aranceles entre países como Taiwán y China, Vietnam, Tailandia y Corea del Sur. Si estos países comenzaran a imponerse aranceles entre sí, la ruta geográfica de los semiconductores estaría sujeta a aranceles directos. Por supuesto, si Estados Unidos comenzara a pedir a otros países que reduzcan su comercio con China, aumentarían las probabilidades de que se produzcan interrupciones y mayores costes en la cadena de suministro de semiconductores que ocurre fuera de Estados Unidos.

Las cadenas de suministro de semiconductores son increíblemente complejas. Si bien gran parte se extiende por Asia, hay partes que pasan por Europa y Estados Unidos, y muchos de los insumos se obtienen a nivel mundial. No es exagerado afirmar que la cadena de suministro es tan compleja que nadie podría comprender realmente los efectos de una guerra arancelaria global en la industria ni de una reorganización masiva de la misma:

Una vez que empezamos a mirar datos que van más allá de las sedes de las empresas y analizamos la geografía del ensamblador que compra el semiconductor, Asia, y China en particular, empiezan a adquirir mayor relevancia:

Si bien la fabricación se concentra en Asia, otros aspectos clave de la cadena de suministro se desarrollan en otros países. Diferentes partes se concentran en Europa, Estados Unidos y Japón:

Para mayor transparencia en la cadena de suministro de móviles, destacan a continuación las empresas que tienen vínculos con Apple. Nuevamente, será difícil para cualquier empresa de semiconductores estar completamente protegida en un escenario de crisis comercial y recesión:

En resumen, hay numerosos riesgos en los semiconductores si se reactivara la guerra arancelaria con China y se produjera una reorientación de las cadenas de suministro. También cabe destacar los riesgos de cola si algo sucediera con Taiwán. Las empresas mejor preparadas para soportar el impacto son Synopsys, Cadence y Broadcom:

Aquí figuran sus acciones preferidas en el ámbito de la inteligencia artificial:

De entre las “Siete Magníficas”, prefieren a Microsoft, que creen que debería estar mejor protegida en el entorno actual y que además cotiza a una valoración atractiva. Microsoft tiene una exposición mínima al riesgo en el comercio minorista, la inversión publicitaria, el hardware cíclico o las cadenas de suministro físicas.
No obstante, las tres más baratas según ellos mismos son (por este orden) Alphabet, Meta y Amazon.
Hay un matiz en el que no estoy del todo de acuerdo con ellos: entre los riesgos que asignan a Alphabet y Meta, figura el posible menor gasto en publicidad.
Lo interesante es que, si la búsqueda en Google ve menos s porque están usando ChatGPT, los M (coste por mil, es decir, coste medio que una empresa paga por 1.000 impresiones publicitarias) en los anuncios de búsqueda aumentan, ya que ChatGPT no planea ofrecer anuncios en un futuro cercano, y los anunciantes están dispuestos a pagar más para llegar al público a medida que su tráfico de búsqueda orgánica disminuye y el grupo de personas / oferta de anuncios se vuelve más pequeño. También significa precios de publicidad más altos en otros lugares donde pueden llegar a la gente: Meta, Amazon, etc.

Hay al menos cinco tipos de riqueza: riqueza financiera (dinero), riqueza social (reputación), riqueza de tiempo (libertad), riqueza física (salud) y riqueza emocional (amor). No te creas tan rico si te falta alguna de ellas.