La actriz Mónica Pont en una fotografía reciente, tomada en RTVE.

La actriz Mónica Pont en una fotografía reciente, tomada en RTVE. Gtres

Famosos INFORMACIÓN EXCLUSIVA

Mónica Pont estalla y demandará a sus padres y a su hermana: escapada a Ibiza y planes de regresar a México

Según confirma EL ESPAÑOL, la actriz vive una de las etapas más difíciles de su vida tras su regreso a España: "Jamás imaginó que su familia la atacara así".

Más información: Mónica Pont vive en régimen de alquiler en una exclusiva zona de Madrid tras romper con Javier Moro: todos los detalles

Publicada

"Jamás hubiera imaginado Mónica Pont (56 años) que su propia familia la atacara así, con esa saña y sin razón ninguna. Todos se han puesto de acuerdo para ir en contra de ella", asegura a EL ESPAÑOL una fuente próxima a la actriz de Hostal Royal Manazares.

Subraya el informante el buen corazón y la paciencia que siempre ha tenido Pont con su familia, pero todo tiene un límite. A nivel privado, Mónica "ha aguantado mucho", pero el hecho de que sus padres, María Teresa y Armando Sánchez, y su hermana, Eva, hayan decidido elevar los desacuerdos a público ha sido el detonante.

Acusan a Mónica de desatención familiar; de no atender a las necesidades de su madre, María Teresa, ingresada en un centro. La señalan por no querer, presuntamente, hacer frente a gastos familiares que le atribuyen. Su padre, Armando, hace unos días, en el programa Fiesta, la definió como "una falacia de persona" y "un conjunto de mentiras".

Mónica Pont en un acto público.

Mónica Pont en un acto público. Gtres

Hace unos días, Mónica se acercó al centro donde hace vida su madre. Lo hizo, según cuentan a EL ESPAÑOL, en son de paz y con buena disposición. Pero nada más llegar, Pont se encontró con una actitud por parte de su madre nada favorable al entente, como se aseguró en Y ahora Sonsoles.

Prácticamente, se la invitó a irse. Mónica deseaba hablar y, en los pocos minutos que duró la visita, le dio tiempo a pedirle a su madre que, por favor, todo lo que tuvieran que decirle se quedara en privado: que no fueran más a la televisión a airear aspectos familiares que debían quedarse en la intimidad del hogar.

No se le hizo caso y la exposición pública volvió a ser un hecho. Todo esto ha provocado que Mónica tome la determinación de demandar a sus padres y a su hermana. Hace unas semanas, EL ESPAÑOL se hizo eco de que Pont había ado con un abogado para tal menester, pero, finalmente, decidió entonces dar una nueva oportunidad.

Ahora no. Ya no piensa ceder más y ha estallado. La demanda, cuentan a este periódico, ya está en marcha y no hay vuelta atrás. Pont va a por todas. En otro orden de cosas, en estos días la actriz se ha alejado de la capital de España y ha viajado hasta Ibiza con un grupo de amigos. Cuentan quienes lo saben que allí está reflexionando seriamente sobre su presente.

Mónica Pont y Javier Moro en un fotomontaje de EL ESPAÑOL.

Mónica Pont y Javier Moro en un fotomontaje de EL ESPAÑOL. Montaje de EL ESPAÑOL.

Nunca imaginó Mónica que regresar de México -donde vivió un robo traumático- iba a acarrearle tantos quebraderos de cabeza. Ella, que se las prometía feliz en su país, junto a su hijo, Javier Sagrera (21), quien le había pedido que volviera. Ella, madre por encima de todo, hizo las maletas por él, por su hijo. Él, Javier, se ha convertido en su gran apoyo.

Es el hombre de la vida de Mónica y hoy madre e hijo tienen una relación maravillosa, cercana y próxima. No siempre fue así, por desgracia, y haber recuperado a su hijo se convirtió en la mayor de las alegrías para Mónica. Ambos viven juntos en Madrid, en la zona de Aravaca, como informó hace unos días EL ESPAÑOL.

La actriz, el día en que realizó la mudanza.

La actriz, el día en que realizó la mudanza. EL ESPAÑOL

Pont reside en la ciudad en régimen de alquiler. En este punto, conviene subrayar que el amor tampoco se ha portado bien con Mónica. En diciembre de 2024, conoció en México al empresario bodeguero Javier Moro (61), y juntos inauguraron el año 2025. Se habló de que estaban encantados el uno con el otro, pero todo eso pasó rápido.

"No es algo nuevo. La cosa no iba bien", sostuvo un informante a este diario. El adiós amoroso nada tuvo que ver con la falta de amor. Se ha debido, los datos que controla este medio, a la gestión que se ha hecho de este romance a nivel público. Por más discreción que ellos mismos trataron de imprimirle a su amor, parece que no fue suficiente.

A las pocas horas, este mismo periódico publicó, en exclusiva, las fotografías de Mónica abandonando el hogar que compartió junto a Javier Moro, en la céntrica calle Goya de Madrid, propiedad este inmueble del presidente de las Bodegas Emilio Moro. Con cara circunspecta, Pont embaló sus enseres y se fue.

¿Volverá Mónica Pont a la ciudad de México? Hace unos días, Beatriz Cortázar aseguró que la propia actriz, harta de la situación que estaba viviendo a nivel familiar, se planteó aceptar un papel que le han ofrecido en una serie de televisión, y abandonar su país. ¿Siguen en pie esos planes?

EL ESPAÑOL ha podido saber que Mónica no tiene intención de irse. Ganas no le han faltado, pero aquí le ata su hijo: "Por él se vino y no volvería a alejarse bajo ningún concepto".