Es probable que Melody sea una de las representantes de España en Eurovisión más carismáticas de los últimos tiempos. La sevillana ya demostró su desparpajo en el Benidorm Fest y, al igual que ha ido escalando posiciones en las casas de apuestas, ha ido cayendo más y más en gracia al público general.

Al menos en España, nuestra abanderada cuenta con una importante baza: ser de sobra conocida desde pequeña por El baile del gorila. Pero, ojo, que como apunta la psicóloga Lara Ferreiro en exclusiva para BLUPER también puede ser un arma de doble filo: "Muchos la comparaban con Marisol, su 'tutor' fue El Fary. Durante muchos años ha luchado para que se la tome en serio y la gente no la viese como 'la niña del gorila".

Es por eso que la autora del libro ¡Ni un capullo más! El método definitivo para quererte y encontrar a tu pareja perfecta destaca que la andaluza "tiene el carácter de un ave fénix, de guerrera": "Si es inteligente, utilizará el empuje de Eurovisión para sacar nuevo disco o una gira. Si lo maneja bien, puede ser su catalizador definitivo".

"Creo que ella se ve ganadora por estar en Eurovisión, pero es ambiciosa. Siente que tiene posibilidades. Desde el punto de vista de la marca personal, si queda mal, puede ser una pesadilla, la confirmación de que era una niña prodigio y que se quedó en eso. Es que Eurovisión es un espejo muy perverso, te catapulta o te lleva a los cielos", lamenta Ferreiro, cuando este periódico le pregunta por cómo gestionaría Melody un mal puesto este sábado.

Según Lara, pasaría por diversas fases: la culpa, los miedos, la tristeza y la adaptación a la nueva etapa después de Eurovisión. "Y luego, a intentar seguir, pero sería un golpe a su autoestima y a su imagen de marca". Una imagen de marca, por cierto, tremendamente "pensada". "La propia canción lo dice y todos los cantantes tienen un poco de actor, sobreactúan".

"Melody ahora viene con una imagen de marca muy pensada. Digna, empoderada, cargada de simbolismo. Profesional, sensata y adulta", expone la profesional, añadiendo: "Ella es diva porque en el fondo se lo cree, su lenguaje corporal es exagerado, mira a la cámara, pero todo forma parte de una coreografía. Y las coreografías son siempre actuaciones. Su lenguaje no verbal es el 70% del mensaje. Hipergestualidad, tópicos de empoderamiento femenino...".

Y, bajo esa imagen empoderada, "ha mostrado inseguridades y vulnerabilidades en entrevistas". Por ello, la experta señala que el de Melody es un "empoderamiento honesto" y que "el problema sería que el personaje se impusiese a la persona". El conjunto, desde luego, ha tenido "una recepción positiva".

"Melody estaba muy baja en apuestas y ahora está en el 14. Hay un entusiasmo general con ella. Ella mezcla andaluces modernos, con interpretación vocal. La percepción de España en los pronósticos ha cambiado y va subiendo", expresa Ferreiro acerca de la que es considerada por muchos 'la última folclórica de nuestro país'.

Una foto significativa 1e6y73

En este camino a Eurovisión, bajo el look de diva, Melody no ha podido ocultar determinados gestos. Fue el caso del momento en que supo que España iba a actuar en la primera mitad de la final. Concretamente, en sexta posición. Una mitad teóricamente peor por ser en la que la audiencia aún está conectado con la final.

"La cara de Melody es un poema. Esas cejas ligeramente elevadas, como que no está conforme. Ese gesto de 'vale, pero no es lo que yo quería', esa sonrisa social, las manos rígidas y el nerviosismo", apunta Lara, pues "el orden de actuación es una estrategia importante". "Las canciones de la segunda mitad son más fáciles de recordar, las que tienen más televoto, por tener mayor audiencia. En los últimos 10 o 15 años, los ganadores actuaron en la segunda mitad del show", recuerda la psicóloga y escritora.