Este martes, 13 de mayo, Eurovisión 2025 dio comienzo, con su primera semifinal. Se prevé una edición menos tensa que la celebrada en Malmö (Suecia) en 2024, lo cual no quiere decir que el concurso no siga arrastrando las mismas polémicas. La principal, la participación de Israel, por lo que está sucediendo en la franja de Gaza.
Mientras la KAN, la televisión pública israelí, está ya en Basilea (Suiza) para participar en la segunda semifinal de este 15 de mayo, más de 70 antiguos representantes han elevado a la Unión Europea de Radiodifusión (EBU-UER) una petición para la expulsión de Israel del festival. Una de las últimas en sumarse ha sido Blanca Paloma, abanderada española de 2023.
Se trata de la primera española en firmar la carta, pero a nadie le debe extraña. Ya el año pasado decidió dar un paso al frente y posicionarse respecto a la situación, que desembocó en boicots dentro y fuera del estadio, abucheos, amenazas de retirada de representantes o gestos a favor de Palestina en la ciudad sueca.
"Todas los países del mundo merecen ser libres", escribió el mismo día de la final de 2024, cuya celebración pendió de un hilo durante unas horas. Además, compartió en sus redes sociales un comunicado de varios abanderados de 2024: Olly Alexander, los españoles Megara, Iolanda, Silvester Belt...
En este escrito, rubricado por un total de 79 artistas, aparecen los nombres de Salvador Sobral -Portugal 2017- o Charlie McGettigan -Irlanda 1994-, que ganaron el certamen en su momento. También concursantes más recientes, como Gåte -Noruega 2024-, Mae Muller -Reino Unido 2023-, La Zarra -Francia 2023-, Systur -Islandia 2022- o LPS -Eslovenia 2022-.
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La cantante ilicitana apoya un escrito que pide formalmente a la organización la expusión de Israel de Eurovisión, en este 2025 representanda por Yuval Raphael y su New Day Will Rise. La joven es superviviente de los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023. En la carta, los artistas se niegan a que el festival "se utilice como herramienta para encubrir crímenes contra la humanidad".
"La UER ya ha demostrado su capacidad para tomar medidas, como en 2022 cuando expulsó a Rusia del concurso. No aceptamos esta doble moral con respecto a Israel", afirman, así como señalan que "al seguir defendiendo la representación del estado de Israel, la Unión Europea de Radiodifusión está normalizando y encubriendo sus crímenes".
"Nos unimos para declarar que la complicidad de la UER con el genocidio de Israel debe cesar", declaran, solidarizándose con los concursantes de este año en Basilea. "Como cantantes, compositores, músicos y otras personas que han tenido el privilegio de participar en Eurovisión, instamos a la UER y a todas sus emisoras a actuar de inmediato y evitar un mayor descrédito y perturbaciones del festival: Israel debe ser excluido de Eurovisión", sentencian.