La ciudad de Zaragoza contará con un nuevo pulmón verde que será igual de grande que dos estadios de La Romareda unida. El Gobierno de Zaragoza ha dado un paso adelante este viernes para hacer de este espacio una realidad de cara al 2027, esta mañana se ha dado luz verde al proyecto de urbanización de El Portillo con un presupuesto de 33,8 millones de euros.

El objetivo es que empiecen las obras a final de año con un plazo de ejecución de 14 meses, que afectarán a 110.000 metros cuadrados de las 14 hectáreas que tiene el ámbito de desarrollo. Una vez sea aprobado por el Consistorio, el proyecto se someterá a información pública para que durante el mes de mayo se puedan licitar las obras que abarcarán dos lotes: el primero comprenderá la mayor parte del proyecto y el segundo se centrará en la demolición del edificio de correos y de la losa del aparcamiento de la estación.

Boulevard conector con el centro 1x1227

Con este plan, que tal como han explicado los técnicos, se adentrá en una nueva etapa de renovación urbana con un ambicioso proyecto que transformará por completo el área entre las calles Escoriaza y Fabro, la avenida de Anselmo Clavé, la calle Escrivá de Balaguer, la rotonda de la Ciudadanía y la glorieta de los Zagríes. El vasto parque de 9 hectáreas será el eje central de este cambio, y junto a él, las principales avenidas de la zona sufrirán una completa modernización, ofreciendo a los zaragozanos un espacio más verde, accesible y con mayor calidad de vida.

Además, la calle Escoriaza y Fabro, en el lado oeste, se convertirá en una avenida de tres carriles con amplias aceras, similares a las del emblemático Paseo de la Independencia, lo que mejorará la conectividad entre la glorieta de la Ciudadanía y la avenida de Goya. Es decir, se generará un extenso paseo de 900 metros que se convertirá en un corredor que unirá el centro de la ciudad con el barrio de Delicias. 

La avenida de Anselmo Clavé también verá mejoras significativas con la creación de una doble calzada de tres carriles y un cuarto carril para giros a la izquierda, simplificando además la Glorieta de los Zagríes y ganando espacio para los peatones. La calle Escrivá de Balaguer, al norte, mantendrá su estructura actual, pero se beneficiará de la transformación global del entorno.

El pulmón verde, en detalle 2z1d

Sin embargo, lo que realmente destaca de este proyecto es el parque de 9 hectáreas que se construirá en el corazón de la zona. Este pulmón verde será el tercero más grande de Zaragoza, solo superado por el Parque del Agua Luis Buñuel y el Parque Grande José Antonio Labordeta.

Con una extensión de 48.800 metros cuadrados de superficie verde, el parque contará con 703 árboles, 19.233 metros cuadrados de jardines, cuatro áreas de juegos infantiles, cuatro zonas deportivas y seis espacios de descanso. Además, se incluirá un carril bici de 1,4 km, un área canina para que los vecinos disfruten con sus mascotas, y un sinfín de paseos peatonales rodeados de vegetación que invitarán a la relajación y el ocio al aire libre.

El diseño del parque no solo responde a las necesidades medioambientales, sino también a las de los ciudadanos. Se crearán varias plazas temáticas, como la Plaza Norte, donde se instalará el 'CoreoPlay', un innovador espacio de juegos acuáticos con luces incorporadas que ofrecerá diversión para toda la familia.

Áreas de juegos y refugios climáticos r4o39

En el centro del parque, la plaza Central contará con áreas de juegos acuáticos diseñadas para diferentes edades, un rocódromo y una zona de cuerdas, convirtiéndose en un lugar ideal para el disfrute intergeneracional. Además, el parque albergará una serie de andenes dedicados al deporte, la actividad física y el juego, como el Andén Fitness y el Andén de Juegos Infantiles.

Este proyecto no solo es una apuesta por la calidad de vida y el ocio, sino también por la sostenibilidad y el cambio climático. Se han diseñado áreas de sombra, sistemas de juegos de agua y se ha optimizado el uso del espacio verde para reducir la huella de carbono de la zona. Además, la pavimentación se reducirá en gran medida, se incorporarán pavimentos más claros y se ampliarán las zonas verdes, lo que contribuirá a mitigar el calor urbano.

El proyecto también contempla el traslado de las instalaciones del Control de Tráfico Centralizado (CTC) de la Estación del Portillo a la Estación Intermodal de Zaragoza Delicias, lo que contribuirá a una mejor integración de la zona en la red ferroviaria y a la modernización de todo el entorno. También se habilitarán espacios para usos terciarios y viviendas, lo que impulsará la revitalización de este importante sector de la ciudad.