La Cámara de Comercio de Alicante ha apostado por proteger y ayudar a los sectores más afectados por los aranceles anunciados por el presidente estadounidense Donald Trump, que ha sido el protagonista en la presentación del informe 'Panorámica Alicante' sobre el balance económico de 2024 y las perspectivas de 2025. Por su parte, el presidente de la institución, Carlos Baño, ha asegurado al empresariado alicantino que "lo superaremos".

Baño, junto con la directora territorial de CaixaBank en la Comunitat Valenciana y Región de Murcia, Olga García, han presentado el informe de coyuntura económica. En él destacan la inmigración, el turismo y el sector inmobiliario como los motores de la provincia el pasado año.

Ahora, las previsiones para este año se han desestabilizado ya que "a la provincia de Alicante nos afecta de una manera importante los aranceles, pues factura casi 500 millones de euros a EE.UU., el 1 % del PIB provincial, y hay sectores que están muy afectados", ha sostenido Baño. 

El presidente de la Cámara de Comercio ha pedido a la istración central medidas para defender sectores como el calzado o el agrícola. Y ha apostado por la diversificación de mercados con misiones comerciales en 2025 a Argelia, Vietnam, Camboya, Costa Rica y México.

La responsable del gabinete de estudios económicos de la Cámara de Alicante, Mari Carmen Pastor, ha despiezado el informe y ha insistido en que "la política económica anunciada por Trump ha aumentado la incertidumbre y las tensiones, geopolíticas y comerciales".

En relación al pasado año en Alicante, el informe ha subrayado que la inmigración ha sido un factor clave para el crecimiento de Alicante, pues ha supuesto un 60 % de los nuevos empleos que se han creado.

Por su parte, el turismo extranjero ha batido récords en 2024 con la mejora de las rentas de los hogares europeos. "La mayor seguridad que ofrece nuestros destinos y la competitividad internacional del sector ha incentivado la llegada de turistas extranjeros".

El año pasado visitaron ocho millones de turistas extranjeros la provincia, realizaron 82, millones de pernoctaciones y un gasto superior a los 10.500 millones de euros. El turismo británico sigue siendo el principal mercado.

El sector agrario presenta un balance negativo con un retroceso del valor añadido bruto de 3,8%. La sequía ha generado pérdidas importantes en los cultivos de la provincia y a esta falta de lluvias se han añadido los recortes del trasvase para los regadíos de la Vega Baja ventas básicas. Además de los bajos precios en origen y la competencia desleal de producciones de terceros países, entre otros factores.

Por el contrario, la demanda de vivienda se ha mantenido fuerte y ha seguido impulsada por el aumento de la renta de los hogares por la inmigración, el dinamismo de la demanda extranjera y también por el descenso de los tipos de interés que ha incentivado a la demanda de crédito. El año pasado se metieron en la provincia, algo más de 56 mil viviendas.

El consumo de los hogares también ha sido uno de los motores del crecimiento. Durante el año pasado, la creación de empleo y el aumento del salario ha seguido sosteniendo la renta de las familias.